La asociación de madres y padres de alumnos (Amipa) del colegio público Joan Veny i Clar de Campos convocó ayer una concentración a las puertas del centro para urgir a las administraciones municipal y autonómica a agilizar el nuevo proyecto de colegio en el municipio.
La reivindicación que empezó en 2008 se ha convertido ya en un auténtico clamor desde hace tiempo entre la comunidad educativa del Joan Veny i Clar, que este año tiene 712 alumnos matriculados en una instalación inicialmente concebida para 400 estudiantes. Esta carencia se suple con siete aulas prefabricadas, según recordaron ayer desde la Amipa. A la concentración de ayer, acudieron unas 250 personas, bajo el lema A Campos volem escola nova ja!.
Lectura de manifiesto
Durante el acto, se leyó un manifiesto en que la comunidad educativa hizo un llamamiento al ayuntamiento de Campos y al Govern -a través de la conselleria de Educación- para que desbloqueen los trámites referentes al solar previsto para la nueva instalación educativa, al lado de la actual residencia de ancianos.
Al parecer, las deficiencias halladas en este solar impiden por el momento que el Consistorio se lo pueda ceder al Institut Balear d'Infraestructures i Serveis Educatius (Ibisec), organismo dependiente de la Conselleria.
Fuentes del departamento autonómico confirmaron ayer que están pendientes de recibir el terreno y que, cuando lo tengan, empezarán a redactar el proyecto. Otra de los temores de la comunidad educativa del CEIP Joan Veny i Clar reside en la financiación inmediata de la infraestructura. Por eso, ayer, pidieron a la conselleria de Educación que incluya una partida económica en los presupuestos de la Comunidad del año que viene para la construcción del nuevo centro. "No pedimos por pedir. Pedimos, porque es justo y necesario", argumentaron desde la asociación de madres y padres de alumnos.
Saturación
La comunidad educativa recordó los problemas de saturación en el centro, donde, según explicaron algunos de sus representantes, las aulas de Educación Especial y de Música se han tenido que acondicionar para acoger otro tipo de clases. Informaron además de que este curso hay matriculados 36 niños más que el año pasado, lo que, dijeron, no ha ido acompañado de más profesores.
