Llega a Palma el histórico velero francés 'Belem', que ha transportado la llama olímpica de París 2024

Manuel R. Aguilera

Este pasado viernes por la tarde llegó al puerto de Palma el Belem, un histórico velero francés que este año cumple 128 años y que estos pasados días fue noticia en los medios informativos al ser la nave que ha transportado la llama olímpica de París 2024 desde Grecia a Marsella.

Se trata de una preciosa embarcación con una larga historia que merece ser contada. Fue construido en los astilleros Dubigeon en Nantes como velero de carga para el empresario Crouan, estando dedicado su nombre al puerto brasileño de Belem. Entró en servicio en julio de 1896 y en sus comienzos la ruta que cubría partía de Nantes rumbo a puertos de Brasil y del Caribe, aunque en ocasiones también visitaba Argentina y Uruguay. Normalmente traía a Europa sobre todo cacao y también azúcar.

En febrero de 1914 fue adquirido por el Duque de Westminster, Lord Hugh Richard Arthur, siendo convertido en yate de lujo y pasando a bandera británica. Empezando a realizar, al finalizar la primera guerra mundial, viajes por diversas zonas del mundo entre ellas el Mediterráneo.

En 1921 lo compró Ernest Guinness, propietario de la famosa fábrica de cerveza, que le cambió el nombre por el de Fantôme II. Su dueño murió en 1939 y durante la Segunda Guerra Mundial el barco permaneció amarrado en la isla de Wight.

En 1952 pasó a manos italianas al ser adquirido por la fundación Cini que tenía por objetivo la educación general y profesional marítima de los huérfanos de la gente de mar. Después de una reforma se convirtió en buque escuela con el nombre de Giorgio Cini y durante años navegó con bandera italiana. En 1965 el barco quedó amarrado en la isla de San Giorgio Maggiore en Venecia, y después de diversa vicisitudes el 1976 se puso en venta.

Finalmente volvió a ser adquirido por intereses franceses en 1979, recuperando el nombre de Belem y bandera francesa, creándose una fundación que se encargó de restaurarlo y posteriormente gestionarlo, siendo primero trasladado a Brest donde empezaron las obras y luego a París para su finalización y que el público general pudiera conocerlo. Desde 1987 vuelve a navegar, siendo utilizado en diferentes usos, entre ellos realizar cursos de iniciación a la navegación.

Sus dimensiones son eslora 51 metros (58 contando el bauprés), manga 8,8 metros. Sus tres palos portan un total de 22 velas, con una superficie vélica de 1.200 metros cuadrados. Tiene dos motores Diesel con una potencia total de 600 CV y su tripulación fija la componen 16 miembros, pudiendo llevar 48 personas más. El Belem, que ya había visitado la isla en diferentes ocasiones, provenía de Marsella, pudiendo ser visto el pasado jueves navegando por las bahías de Alcudia y Pollensa.