Así era el túnel del tren que atravesaba Palma bajo tierra y ahora será recuperado por el Ayuntamiento

Una de las reivindicaciones de entidades de Mallorca como Amics del Ferrocarril y ARCA, la recuperación del túnel subterráneo que unía el centro de la ciudad con el puerto de Palma, se hará realidad, tras asumir el Ayuntamiento de Palma la recuperación del antiguo trazado subterráneo de 1.252 metros por el que transitó un tren de mercancías desde el año 1931 a 1965.

Como explicó en este diario Miquel Àngel Riera i Ximenis, presidente de la asociación Amics del Ferrocarril, con motivo del 90 aniversario de la puesta en marcha del trazado, "la línea del puerto de Palma fue, desde sus inicios, prioritaria para el Ferrocarril de Mallorca, pues tenía que permitir el acceso directo de las mercancías a los muelles", explica. "En consecuencia fue la segunda línea que entró en funcionamiento. Lo hizo en el año 1877, inmediatamente después de la de Inca".

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Sin embargo, como al principio se trataba de un recorrido urbano en superficie, que bajaba por la Rambla y el Born, se hizo la solicitud de la concesión como tranvía. El recorrido provisional, como narra Miquel Àngel Riera i Ximenis, se utilizó durante 54 años, hasta que en 1931 entró en servicio el ferrocarril en el túnel hasta el Puerto de Palma. Las obras se iniciaron tres años antes, en 1928. Y con el material de la excavación se ganó espacio al mar, construyendo una explanada donde hoy se encuentra el Parc de la Mar, donde se instaló una estación de clasificación.

La longitud del nuevo trazado era de 2.046 metros, con 1.252 metros de recorrido subterráneo. Además en la estación del puerto de Palma había 900 metros de vías secundarias.

Riera i Ximenis también descubrió en su artículo de Diario de Mallorca que durante los años de la Guerra Civil el túnel se utilizó como refugio de la población durante los bombardeos aéreos. Por este motivo se construyeron accesos de entrada en la plaza Major y también al lado del Teatre Principal de Palma.

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El túnel de la memoria y sus últimos vestigios

En los últimos años de funcionamiento de la línea, el principal producto que transportaba el tren subterráneo hasta el puerto de Palma era carbón procedente de Lloseta, que en el puerto se cargaba en barcos y se enviaba a Alicante. La línea dejó de usarse en 1965, cuando el tren subterráneo realizó sus últimos viajes. Y a partir de entonces sus vestigios empezaron a desaparecer. Primero con el desmantelamiento de las vías y luego con la construcción de los aparcamientos subterráneos de la plaza Major (años 70), el Olivar (1998) y la plaza de España (2002), cuyo acceso por la calle Marquès de la Fontsanta es el mismo que la extinta boca norte del túnel.

El trazado original, añade Miquel Àngel Riera i Ximenis, ha sufrido dos modificaciones. Con la construcción del aparcamiento de la plaza Major, cuando su trazado fue parcialmente cortado. La segunda la sufrió con la construcción del aparcamiento subterráneo del Mercat de l'Olivar, que supuso el corte de 80 metros de su trazado, de una forma consciente.

No obstante, destaca Riera i Ximenis, "el túnel es perfectametne accesible y visitable desde la salida del puerto, bajo las murallas, hasta el aparcamiento de la plaza Major, y también el tramo desde la citada plaza hasta el Mercat de l'Olivar".

En la entrada de la muralla por la que pasaba el ferrocarril hay un escudo de piedra con un tren de vapor esculpido que rememora su historia. Además del citado escudo de piedra, el único recuerdo que queda del ferrocarril es un tramo de vías en el Moll Vell . Cuando se remodeló la zona frente a la sede de la Autoridad Portuaria de Baleares, salió a la luz el raíl y se decidió colocar una placa que dice así: "Antiguo tramo de vía férrea que unía el puerto de Palma con la ciudad para transporte de mercancías entre 1887 y 1965", se puede leer.