La Associació per a la Revitalització dels Centres Antics (ARCA) lamenta que el proyecto de restauración de las Torres del Temple mantenga el cuerpo central de la fachada, añadido en el siglo XIX, y que el Consell de Mallorca ha obligado mantener. La entidad conservacionista considera que “el resultado no es óptimo” ya que así no se apreciará lo que fue la antigua Puerta de Gumara.

Tras años de tramitación, la rehabilitación de las Torres del Temple se iniciará este mismo año, para que esta antigua puerta de acceso a la Palma medieval sea un museo en 2023, según el proyecto de los arquitectos José Antonio Martínez Lapeña y Elías Torres.

Sin embargo, ARCA ha recordado que “tanto el Ayuntamiento como el arquitecto Elías Torres estuvieron de acuerdo” en la eliminación de ese añadido entre las dos torres, por lo que se modificó el proyecto original de rehabilitación. “No obstante y a pesar de nuestro desacuerdo, el Consell no aceptó la eliminación de este cuerpo central, obligando a su consolidación”, ha añadido ARCA.

“Así, se ha perdido una oportunidad para poder recuperar el Temple siguiendo los criterios de la ficha del catálogo que recogía eliminar el cuerpo central manteniendo el arco de entrada y recuperando las dos torres. Se trataba de recuperar la volumetría original”, ha lamentado ARCA.

Según ha recordado la asociación proteccionista, “el cuerpo central es un añadido documentado el siglo XIX por un motivo de crecimiento de la población. Durante la Guerra Civil se destruyó esta parte central producto de los bombardeos y se reconstruyó posteriormente. A estas alturas, no entendemos por qué se quiere consolidar, dificultando la interpretación de la puerta de Gumara, que tendría que ser simplemente monumental”.

Con el proyecto actual, “no es posible entender visualmente las Torres de la Puerta de Gumara y más bien se confunde con un edificio de viviendas más”, ha criticado ARCA.