Así han dejado unos okupas la casa de Sencelles donde vivían: heces en la piscina y destrozos irreparables

La pareja de okupas que ha disfrutado de una vivienda de lujo de Sencelles durante casi un año ha decidido abandonar la casa por su propia voluntad. Pero antes de irse decidieron destrozar a propósito todos los objetos e instalaciones de la finca que pudieron romper para perjudicar a los propietarios. 

Los dueños, que invirtieron todos sus ahorros para comprar esta finca, tienen cuatro hijos. Necesitaban ayuda y contrataron a una mujer, para que se encargara de la limpieza y del cuidado de los niños. A cambio, la empleada podía vivir en la casa de invitados. La mujer se trasladó a esta casa y lo hizo junto a su pareja.

Durante los dos meses en los que estuvo contratada apenas cumplió con su obligación y los dueños decidieron despedirla. Se lo comunicaron a ella, pero respondió que de ningún modo saldría de la casa. Les dijo que era su casa, pese a que no pagaba nada por vivir en ella. La vivienda de invitados está a una distancia muy próxima a la casa principal.

Durante los meses en los que esta pareja ha permanecido de okupa en la propiedad la convivencia con los dueños ha sido muy violenta. El dueño ha sido varias veces amenazado por el marido. Este individuo, que según se ha sabido después, tenía antecedentes, acostumbraba a salir desnudo de la casa y bañarse en la piscina.

Todas estas escenas, que las hacía estando ebrio, las presenciaron los cuatro niños. Los menores empezaron a tener pesadillas y los padres decidieron que lo mejor era alquilar otra casa. Mientras ellos se iban a un piso en Palma, los okupas seguían disfrutando de una lujosa vivienda, sin pagar un solo euros.

Se marcharon hace unos días

Los dos moradores abandonaron la casa hace unos días. Cuando los dueños entraron de nuevo se encontraron con múltiples destrozos. No hay rincón que no esté repleto de suciedad, pero además , los okupas se dedicaron a destrozar a propósito la mayoría de muebles y otros objetos de la vivienda. Además, en el exterior también han provocado graves daños muy importantes. Cortaron una tubería para que saliera el agua a chorros y arrojaron heces a la piscina.

Los propietarios han presentado una denuncia contra estas dos personas por los daños que han ocasionado y confían en que algún día los paguen.