El paso de la borrasca Aline por Mallorca todavía mantendrá la alerta hasta la madrugada del sábado, aunque desde el jueves hasta el viernes el aviso de la Aemet haya pasado en la isla del naranja al amarillo por el temporal marítimo, así como por los fuertes vientos del oeste y del suroeste que han azotado sin tregua la isla.

Las rachas de viento han alcanzado por ahora los 95 kilómetros en el Port de Sóller; los 94 en Portocolom, los 91 en Banyalbufar, los 90 en la Serra d'Alfàbia, los 87 en Llucmajor y los 84 en el Dique del Oeste de Palma, donde el fuerte oleaje sobrepasa la altura de la construcción, baña el edificio de la Escuela Náuticopesquera y alcanza hasta la carretera.

Las tormentas, sin embargo, han dejado hasta el momento escasas lluvias en Mallorca: 15 litros por metro cuadrado en Escorca; 12 en Alfàbia, 11 en Lluc y 7 en Banyalbufar.

Durante la tarde del viernes el cielo se mantendrá cubierto con lluvias y chubascos ocasionalmente fuertes y con tormenta. Las temperaturas seguirán en descenso, alcanzándose las mínimas al final del día. Viento se mantendrá fuerte del oeste y suroeste con rachas de 80 a 110 kilómetros por hora, que en cumbres y cabos pueden superar los 120 kilómetros, más moderados a nivel del mar. La Aemet mantiene la alerta amarilla.