Fòrum de la Societat Civil: "En Mallorca se han construido cero viviendas nuevas públicas en 2022"

Esta mañana se ha presentado la primera parte del documento sobre indicadores de transición social en la isla y lamentan que se esté saliendo de la crisis con las mismas recetas de "más turismo y más inmobiliaria"

Los ponentes del Fórum de la Societat Civil durante la presentación del primer informe.

Los ponentes del Fórum de la Societat Civil durante la presentación del primer informe. / Alba Vázquez de la Torre

El Fòrum de la Societat Civil ha presentado esta mañana el primer volumen de una serie de publicaciones con el título Evolució de les transicions con las cuales quieren ofrecer a las instituciones y a la ciudadanía datos cuantificables que permitan medir si se está avanzando en la transición de modelo, a escala económica, ecológica y social.

Los miembros del Fòrum, Jaume Garau (Fundació Iniciatives del Mediterrani), Andreu Grimalt (EAPN Baleares) y Rafel Borrás (Col·lectiu Alternatives) han expresado en la rueda de prensa su pesar por el hecho de que se esté abordando la actual crisis con los mismos enfoques y soluciones que se utilizaron en las anteriores, «con más turismo y más inmobiliaria».

Este primer estudio es sobre la transición de modelo a escala social y se ha centrado en las áreas de vivienda, población y vulnerabilidad. Algunas de las conclusiones a las que han llegado a partir de los datos recogidos de instituciones públicas estatales y autonómicas, académicas y de la sociedad civil en dos momentos concretos (2019 y 2022) son: «que la excesiva dependencia del mercado turístico crea un mercado laboral frágil y que la pobreza extrema es todavía muy importante».

Indicadores de Población

El informe destaca un aspecto relevante en relación a la población en Mallorca, el cual indica que la cantidad de habitantes ha aumentado de 836.038 a 912.544 en 2022, y la presión demográfica ha crecido de 1,46 a 1,47 millones de personas. «Estos datos son muy negativos, repiten el patrón y la inercia tradicional de un modelo al que nos oponemos. Tendría que haber un descenso en la presión humana», señaló Jaume Garau.

Por otro lado, han subrayado que hay dos indicadores positivos, que es el aumento de personas afiliadas a la Seguridad Social que ha habido un aumento de 16.789 personas y el otro indicador positivo es que el paro ha bajado de 48.810 a 30.003 un total de 18.177 personas menos.

En cuanto al mercado laboral, los datos demuestran que las personas afiliadas en los sectores de la hostelería y del inmobiliario crecen tanto en temporada baja como el alta. “La transición laboral tendría que suponer una tendencia contraria, hacia la reducción de los lugares de trabajo en estos sectores y el aumento en otros, especialmente el de la agricultura o la industria, cosa que no pasa”, han analizado desde el Foro.

Indicadores de Vulnerabilidad

El segundo grupo en lo que se refiere a pobreza extrema han detectado que ha aumentado (techo económico por debajo de 6.300 euros en el año) "ha subido seguramente por efectos de la pandemia". También aumentan los pensionistas que se encuentran por debajo del umbral de pobreza extrema hasta el 18,1%, que en porcentaje constituyen casi el doble respecto al de la población general que es el 9,2%. "No ha habido una transición en este apartado, al final en las crisis los pobres son los más afectados", han puntualizado.

Por otro lado, en el indicador de la gestión de la dependencia ha habido un aumento del 2,7% y también un incremento de atención domiciliaria, un 3,34%. " Desde el Foro estamos a favor de fomentar un cambio de residencias ya que las personas mayores quieren ser atendidas en sus casa, hay que facilitar que las personas puedan vivir todo lo máximo posible en los hogares donde han crecido", han explicado.

Indicadores de Vivienda

En materia de vivienda, han advertido que la situación es especialmente crítica. «Décadas de inhibición pública para la creación de vivienda social, la creciente compra de viviendas por extranjeros y el aumento exponencial del turismo de alquiler vacacional, han hecho subir los precios de compra y de alquiler de tal manera que hacen inaccesible el derecho a la vivienda por una gran mayoría de la ciudadanía», ha expresado Garau.

Los datos dicen que en 2019 se construyeron tres viviendas públicas nuevas y que en 2022 no se construyó ninguna, tomando como referencia la certificación final de obra. En cambio viviendas nuevas privadas se construyeron 3.063 residencias. Así, han alertado de la "falta masiva" de construcción de vivienda pública.

Los datos muestran que el gasto que se tiene que hacer en Baleares para pagar la vivienda ha pasado del 46% del sueldo al 2019 al 60,8% al 2022, el doble que al resto del estado español.

Asimismo, el porcentaje de emancipación de los jóvenes se ha reducido un 2% en cambio según refleja el estudio, la compra de vivienda por parte de extranjero ha aumentado casi un 2% respecto a 2019.

Por otro lado, otro indicador es que la protección de los desahucios ha aumentado tanto en hipotecarios como en alquiler, pero "es insuficiente", han remarcado. «Este escudo social sólo protege a quienes han recibido las bofetadas más fuertes pero el grueso de la población sigue ahí, ya que en 2022 hubo 1.156 desahucios por el impago de los alquileres y 158 por desahucio hipotecario, por lo tanto no es un sistema que proteja a todos», ha indicado Garau.

“Los datos de evolución observados en cuanto a la población y al mercado laboral muestran que se está dando continuidad al patrón histórico por otras salidas de crisis económicas y turísticas: más actividad turística, más mano de obra extranjera y más presión humana sobre el medio ambiente. Es el camino del modelo insostenible que ya conocemos" han concluido los ponentes.