Cuarenta refugiados ucranianos que permanecían alojados en el hotel Bellver han sido trasladados esta mañana a la tercera planta del hospital Sant Joan de Déu del Coll d'en Rabassa donde está previsto que permanezcan un año. Tras recibir ayer imágenes en un chat de compatriotas del alojamiento dado a otros ucranianos en Andalucía, entre el colectivo de desplazados de Palma se había despertado una gran inquietud acerca del lugar al que iban a ser trasladados durante la mañana del miércoles y que fue el detonante de las críticas que vertieron ayer contra la Cruz Roja por la manera en la que estaba gestionando la crisis. Sin embargo, al bajarse este miércoles del autobús de la EMT que les ha trasladado desde el Palma Bellver al hospital Sant Joan de Deu, todos ellos han respirado aliviados al comprobar que se les iba a alojar en unas instalaciones modernas que, además, están en primera línea y gozan de unas espectaculares vistas al mar.
Desde Cruz Roja lamentaron el malentendido y admitieron que quizá ha faltado algo de información más precisa sobre el lugar al que iban a ser trasladados así como que sus condiciones eran dignas, sin nada que ver con las imágenes del centro de acogida de Andalucía. Los propios ucranianos revelaron que a principios de esta semana fueron trasladadas 13 personas a esa comunidad autónoma y que, tras comprobar las condiciones del alojamiento andaluz, habían regresado 6, cuatro mujeres y dos niños.
Junto a los 40 ucranianos desplazados al Sant Joan de Déu, de los que 8 eran menores de edad, en la mañana del miércoles también se ha trasladado a otros 18 al Colegio La Salle de Palma. Y mañana por la mañana está previsto el traslado, también con la colaboración de varios autobuses de la EMT, de otros 160 alojados en el Palma Bellver al Palma Bay Club Resort de la Playa de Palma tras haber alcanzado la Cruz Roja un acuerdo con este establecimiento para acogerlos durante un periodo mínimo de un año.
