La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé para este lunes en Balears intervalos de nubes medias y altas tendiendo por la mañana a poco nuboso o despejado; brumas matinales.

Además, prevé temperaturas nocturnas con pocos cambios y diurnas en descenso, notable en el norte de cada isla. El viento soplará del nordeste y este en el archipiélago.

De esta forma, el termómetro podría dar un respiro después de una semana de calor tórrido, como se evidenció también ayer en toda la isla.

La Agencia Estatal de Meteorología mantuvo el aviso naranja por altas temperaturas en gran parte de las islas entre las 12.00 y las 18.59 horas del domingo.

El interior de Mallorca, el norte y el nordeste de la isla y la Serra de Tramuntana estuvieron en aviso naranja por temperaturas que rondaron los 40 grados.

38 grados

En situación parecida se encontraron Eivissa y Formentera, donde el mercurio rozó los 38 grados en las horas centrales del día. En Menorca, también en aviso naranja, el termómetro rondó los 37 grados.

Por su parte, el sur y el levante de Mallorca estuvieron en aviso amarillo por temperaturas de hasta 38 grados. Además, la Aemet situó a Menorca en aviso amarillo para el martes por fenómenos costeros con olas de hasta tres metros en el norte de la isla.

Riesgo laboral

Desde una perspectiva laboral, el sindicato CCOO advirtió el fin de semana de la necesidad de que las empresas estén preparadas para afrontar este tipo de olas de calor. Consideró que estas situaciones deberían contemplarse en el Plan de Prevención de Riesgos Laborales.

«Los episodios de altas temperaturas son muy previsibles, se repiten cada año y afectan a las condiciones de trabajo. Por tanto, ¿por qué esperar al fenómeno meteorológico ‘ola de calor’ para establecer medidas básicas como asegurar sombras y aislamiento a fuentes radiantes; suministrar agua o bebidas isotónicas, y disponer de espacios donde refrescarse durante los descansos?», arguyó el sindicato en un comunicado.

Argumentó Comisiones Obreras que éstas son acciones que «pueden reducir la exposición al riesgo térmico y mejorar las condiciones de seguridad y salud de las personas trabajadoras».