La Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) ha sancionado con 124.000€ a la empresa del exestratega electoral de Més, Jaume Garau, por formar parte de un cártel de consultorías a nivel nacional que operaba para manipular contratos públicos a través de procesos negociados sin publicidad, entre ellos del Govern. Según la CNMC, que ha sancionado con 35.000 euros a Garau, con 55.000 a su socia, Rocío Cortés, y con 34.000€ a su consultora, Regio Plus, la misma que cobró de varias consellerias de Més la pasada legislatura, entre las administraciones afectadas está el Govern balear.

Según han avanzado los servicios informativos de IB3 y ha podido confirmar este diario, después de analizar más de 200 contratos la CNMC ha acreditado que, entre los años 2008 y 2018, diferentes firmas de consultoría a nivel nacional se organizaron en dos redes de colaboración, mediante las que constituyeron dos cárteles diferenciados. Las empresas intercambiaban información comercial sensible y se sirvieron de estrategias comunes para no competir cuando participaban en las licitaciones para ofrecer servicios de consultoría solicitados por distintas Administraciones Públicas. 

Precisamente, algunos de estos contratos son los que la justicia llegó a investigar sin hallar indicios delictivos y que Garau consiguió de diversas conselleries de Més durante la legislatura 2015-2019. La CNMC apunta, de hecho, a que generalmente, se trataba de contratos negociados sin publicidad, en los que la administración invitaba a un número reducido de empresas para que presentasen sus ofertas en competencia. Ambos cárteles aprovecharon este procedimiento para servirse de las conocidas como “ofertas de cobertura”, a través de las cuáles presentaban una oferta perdedora.

En ocasiones incluso, según acredita la CNMC, la propia consultora que pedía la cobertura elaboraba las ofertas de sus supuestos competidores o preparaba la carta de renuncia a la invitación. Mediante este sistema, de forma continuada, se elevaron los precios que pagaba la administración por los servicios de consultoría.

Cabe recordar que lo que fue conocido como Caso Contratos llegó a propiciar la dimisión de la entonces consellera de Cultura de Més, Ruth Mateu, y de varios de sus colaboradores, así como la apertura de un expediente de expulsión contra Jaume Garau, que acabó dejando la militancia de Més después de haber liderado la campaña de 2015 en la que los ecosoberanistas sacaron su mejor resultado. La entonces dirección de Més defendió que si bien todo era legal, que la contratación de su estratega no era “estético” y denunció haber sido utilizados por Garau.