La conselleria de Educación y el Obispado quieren llegar a un acuerdo y establecer unas líneas de funcionamiento claras para el colectivo de profesores de Religión Católica.

El conseller March y el administrador apostólico de Mallorca, Sebastià Taltavull, se reunieron ayer para empezar las negociaciones, en un encuentro que desde Educación se calificó de "cordial". Asimismo, la dirección general de Personal Docente y el comité de profesores de Religión ya han empezado también a trabajar en esta línea.

La reunión de March y de Taltavull tiene lugar después del ERE que la conselleria de Educación ha llevado a cabo este curso; una 'reordenación' del profesorado de esta asignatura que no ha supuesto ningún despido, pero sí una reducción de jornada para 80 de los 175 docentes de Religión que hay en las islas. También se han producido cambios de centro.

Esta 'reordenación' -ésa es la palabra que usa Educación- del profesorado de Religión se llevó a cabo debido a la aplicación de la LOMCE. La ley orgánica establece que los colegios e institutos deben ofertar como mínimo 45 minutos semanales de Religión. Antes, el mínimo que fijaba la ley era de 90 minutos a la semana. El Govern del Pacte ha fijado el mínimo obligatorio en una hora semanal, dejando a los centros la opción de ampliar a 90 minutos. La mayoría de colegios e institutos optaron por ofertar solo el mínimo obligatorio de una hora de Religión, por lo que Educación decidió acometer el ERE que se negoció durante el pasado verano.

El sindicato USO llevó las condiciones del ERE a los tribunales. También presentó un recurso para exigir para el profesorado de Religión los mismos complementos salariales por antigüedad (sexenios) que perciben los interinos.

Desde la conselleria de Educación se ha subrayado varias veces que los profesores de Religión no pueden tener las mismas condiciones que un interino ya que no acceden a la función docente de la misma manera ni se les asigna un puesto en los centros siguiendo el mismo procedimiento que los interinos (mediante las listas que los bareman por criterios de formación y experiencia).

La enseñanza de esta asignatura se regula a través de un convenio especial entre el ministerio de Educación y la Conferencia Episcopal. Los centros están obligados a ofertarla y los alumnos tienen libertad para matricularse o no.

Elección de lengua

Por otro lado, María Dolores Carrasco -la madre a la que el TSJB le ha rechazado la opción de cambiar la lengua de lectoescritura de su hijo- presentó ayer en la Delegación del Gobierno 25.00 firmas recogidas a través de Change.org para solicitar la libre elección de lengua vehicular en el sistema educativo de Balears.

Las firmas serán trasladadas al ministerio de Educación, según informó esta madre en un comunicado, en el que lamentó las "dificultades"existentes para poder elegir el castellano como lengua principal.

Carrasco presentó un recurso ante el TSJB para que su hijo pudiera cambiar su lengua de iniciación a la lectoescritura de catalán a castellano. Esta madre lamentó que cuando su hijo empezó Infantil eligió catalán coaccionada por el centro y que ahora que ha llegado a Primaria el tribunal le deniega la opción de cambiar la lengua.