Después de Educación, le llega el turno a Salud. Los profesionales del Servei de Salut que tratan a menores deberán acreditar que no han cometido delitos sexuales como sus compañeros profesores en cumplimiento de una ley estatal, la de Protección a la Infancia, según confirmó el Servei de Salut, que prevé que sus trabajadores tengan que demostrar que no tienen ningún delito sexual a sus espaldas el próximo verano a más tardar.
La directora general de Recursos Humanos del IB-Salut, Guadalupe Pulido, confirmó este extremo admitiendo que “quizá vamos un poco retrasados. Educación lo ha hecho mejor”, señaló atribuyendo en parte esta demora a la eventualidad del Gobierno central en Madrid, que se encuentra en funciones y con al parecer unas elecciones en ciernes.
La responsable de personal de la mayor empresa pública de las islas explicó que en una comisión de recursos humanos del Consejo Interterritorial de Salud ya se ha hecho entrega a todas las CC AA de un borrador de la instrucción que deben de aplicar todos los departamentos de Salud autonómicos para cumplir con la Ley de Protección de la Infancia.
No obstante, Pulido dijo que el borrador presentado se encuentra aún en fase de alegaciones, es decir, a la espera de los peros que le pongan las diferentes regiones del país. Preguntada si Balears mostraba alguna disconformidad con el documento que le ha sido presentado o si pensaba presentar alguna alegación, la responsable del personal contestó que no.
Y cuestionada sobre cómo se pensaba realizar la comprobación de que los aspirantes a un puesto en la sanidad pública balear para desempeñar un trabajo en el que mantengan contactos con menores de edad no han cometido previamente un delito de índole sexual, Pulido matizó que todavía no lo tenían muy claro.
Consta o no consta
Sobre la mesa hay 2 opciones. La primera de ellas, que la Administración central autorice a la autonómica el acceso al Registro Central de Delincuentes Sexuales, un listado que comenzó a estar operativo el pasado mes de marzo con motivo de una modificación aprobada por Madrid en la citada ley de Protección a la Infancia. En este caso, el Servei de Salut se limitará a introducir el nombre de la persona que ha obtenido el puesto de trabajo susceptible de este requisito y si aparece la leyenda “no consta”, la contratación seguirá su trámite habitual.
La segunda opción que se baraja es que sea el propio postulante al puesto de trabajo el que concurra al proceso de adjudicación con un certificado que avale que no figura en el citado listado.
Sea cual sea la forma que se adopte finalmente, Pulido considera que no será un trámite “muy farragoso. Al contrario, pensamos que será fácilmente implantable”.
La titular de recursos humanos añadió que se pedirá este certificado a los pediatras y a las enfermeras de pediatría así como a todas las especialidades médicas y unidades que tienen relación con menores, sean de las categorías profesionales que sean, especificó dando a entender que también afectará a celadores y auxiliares.
“Y también deberá presentarlo el personal en formación (mires), que rotan por todos los servicios”, concluyó Pulido, que confió que este trámite ya esté implantado en julio o agosto a más tardar.
