Un hecho bastante habitual en las consultas de los centros de salud de Palma, que el médico deje "colgados" a sus pacientes para ir a asistir una urgencia domiciliaria, es ya menos frecuente gracias a la creación, el pasado 14 de abril, del Dispositivo de Intervención Rápida (DIR), un equipo formado por un médico y una enfermera que se encarga de forma exclusiva de cubrir estas emergencias de los usuarios de los 19 centros de salud de Palma.
"Se trata de un equipo que pertenece a la Gerencia de Atención Primaria (GAP) pero que es movilizado por el servicio de emergencias del 061", matiza Carlos Raduán, subdirector médico de la GAP que especifica que desde el momento de su creación hasta el pasado 29 de mayo, apenas un mes y medio, el DIR ha realizado un total de 122 salidas.
El funcionamiento de este dispositivo es simple. El paciente llama al 061, dónde el facultativo regulador valorará la gravedad del caso y procederá a movilizar los efectivos pertinentes. Hasta ahora, para asistencias que no admitían demora pero que no revestían una urgencia vital, el servicio de emergencia se ponía en contacto con el centro de salud del paciente afectado y reclamaba el desplazamiento de un profesional para que fuera atendido.
"Pero ahora lo hace este equipo, lo que evita que se demore la actividad asistencial programada que esté llevando a cabo en el momento de la emergencia y reduce el tiempo de espera del enfermo que aguarda en su domicilio la llegada del médico", resalta el subdirector médico las ventajas del nuevo sistema implantado, por el momento, solo para los 19 centros de salud de Palma.
Este equipo trabaja de lunes a jueves de ocho de la mañana a tres y media de la tarde, momento en el que la asistencia queda otra vez en mano de los centros de salud hasta las cinco de la tarde, cuando comienza la actividad de los servicios de urgencias de Atención Primaria (SUAP). Y los viernes de 8 a 14.30 horas ya que deben devolver el vehículo que usan para sus desplazamientos a los SUAP, que este último día de la semana inician su jornada a las tres de la tarde.
Sobre la labor asistencial desarrollada por el DIR en este primer mes y medio de actividad, Carlos Raduán precisa que de las 122 salidas realizadas, 6 fueron para atender a pacientes de edad pediátrica, menores de 14 años, y que en diez ocasiones fue preciso "medicalizar" una ambulancia normal para afrontar con mayor seguridad el traslado hospitalario.
"De los 19 centros de salud de Palma que están cubiertos por el nuevo dispositivo, los que más lo utilizaron fueron Escola Graduada, con trece requerimientos, el Coll d'en Rabassa, con 12, y el de s'Escorxador y Camp Redó, ambos con diez asistencias a pacientes suyos", detalla Raduán.
Seis de cada diez, ingresados
También llama la atención que, de las 122 asistencias realizadas en este mes y medio, en 73 de ellas, casi en el 60%, el destino final del requiriente fue el hospital. Por contra, en 49 atenciones el paciente permaneció en su casa.
En cuanto a las patologías atendidas, las más prevalentes fueron por dolor, tanto mecánicos, traumáticos como viscerales, malestar que provocó veinte desplazamientos de la nueva unidad, seguido de episodios de agitación y ansiedad, que motivaron 12 asistencias en domicilio, y por síncopes, que provocaron igual número de atenciones. Raduán añade que en otros diez domicilios hubo que atender problemas de vértigo periférico y que en otros seis se asistió a pacientes con dificultades respiratorias.
Sobre la posibilidad de ampliar el horario y los efectivos de este dispositivo, Raduán se muestra cauto y emplaza al balance de actividad que se haga con un año completo de implantación.
