­Juristas, sindicatos y Assemblea de Docents coincidieron ayer en señalar que el Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) no está en vigor ahora mismo y no puede aplicarse, por más que el Govern diga lo contrario amparándose en que está a la espera de que se resuelva su recurso.

Los servicios jurídicos de las diferentes entidades así como expertos en leyes consultados por este diario replican al Ejecutivo autonómico y señalan que el TIL no puede continuar aplicándose en los centros educativos como si nada hubiera pasado después de la suspensión cautelar fijada por el TSJB el miércoles pasado, independientemente del recurso presentado.

La Assemblea matiza que el TIL solo puede permanecer en los centros en aquellos casos en los que el proyecto ya ha sido aprobado por el claustro. Aún así, como acordó ayer en Petra, hace un llamamiento a los centros para que vuelvan a su proyecto lingüístico anterior al TIL “para abrir un nuevo escenario de seguirdad jurídica y tranquilidad”.

Y mientras los representantes docentes organizaban el retorno a la época preTIL e intentaban arrojar luz legal a la situación actual, el president Bauzá y la cúpula de Educación, Joana Maria Camps y Guillem Estarellas, se mantuvieron ayer mudos sobre el tema.

Delito de desobediencia

Las mencionadas fuentes jurídicas consultadas señalan además la inutilidad del recurso de reposición, ya que el Govern lo deberá presentar ante la misma sala que ha decretado la suspensión del TIL y, con toda probabilidad, no obtendrá un resultado diferente de los autos hechos públicos el martes. Los magistrados adoptaron esas resoluciones precisamente para obligar al Consolat de Mar a acatar las sentencias notificadas el martes que anulaban el decreto TIL original y cuyos efectos el equipo de gobierno quería dejar paralizados a la espera de que el Supremo resolviese su recurso. Los juristas sostienen además que si Educación obliga a los centros a seguir aplicando el TIL, la Conselleria podría ser acusada de un delito de desobediencia.

La confusión sobre qué se puede hacer y qué no y cómo proceder impera entre el profesorado y los directores mientras la conselleria de Educación permanece muda, pero ese silencio perjudica y confunde también a otros profesionales clave ahora mismo: los inspectores.

Desde la asociación ADIDE, a la que pertenece el grueso de la plantilla de Inspección, recomendaron ayer a sus afiliados “acatar las sentencias” y paralizar cualquier acto relacionado con el TIL -como firmar informes o velar por su cumplimiento en los centros- hasta que no haya un pronunciamiento judicial que apunte en el sentido contrario o reciban “una instrucción expresa” sobre cómo se han de aplicar los fallos judiciales de los últimos días.

“El TIL ha muerto”

Los representantes de los docentes han corrido la voz de que “el TIL ha muerto”. El STEI-i insistía ayer a través de su Twitter: “El TIL está suspendido. El recurso no tienen efectos sobre las medidas cautelares hasta que se resuelva”. Ayer se dio la circunstancia además de que los sindicatos STEI-i, CC OO, FETE-UGT y ANPE estaban convocados a una reunión en la sede de Educación para tratar sobre otras cuestiones, reunión a la que no asistió ningún representante político de la Conselleria.

Toni Baos, de CCOO, aprovechó para registrar un escrito pidiendo a la Conselleria una reunión urgente para “volver al punto de partida” y pactar el modo de continuar el curso. Maria Alarcón, secretaria general en FETE-UGT, registró a su vez una instancia solicitando a Educación la publicación de “unas instrucciones de mínimos” para el presente curso y para evitar así “una interpretación divergente y anárquica”. Su escrito insta a acatar los autos judiciales y señala que “las autoridades políticas han de conocer la responsabilidad personal que pueden asumir en caso de desobediencia a las ordenes judiciales”.

El sentimiento de victoria se hizo patente en el encuentro urgente que mantuvo ayer la Assemblea de Docents en Petra, que comenzó con los más de 300 asistentes agarrados de las manos y entonando L’Estaca de Lluís Llach. Los profesores pudieron plantear sus dudas a los abogados Josep de Luís y Josep Lluís Torres y además se pactó instar a los los claustros a que vuelvan a sus proyectos lingüísticos anteriores al TIL para acabar así “con la inseguridad creada”.

Según explicó el portavoz Iñaki Aicart su apuesta es que los nuevos proyectos pasen por los consejos escolares de cada centro, ahora desplazados por la nueva ley de educación (LOMCE). Asimismo, la Assemblea recuerda que el TIL no era el único punto de la lista de reivindicaciones (incluía revertir los recortes salariales y en becas y retirar leyes como la de Símbolos, entre otras cosas) y que la lucha continúa.