La sala segunda de la Audiencia de Palma conoce muy bien el caso Nóos, de hecho se ha pronunciado sobre los principales avatares del mismo en múltiples ocasiones, y mantiene la tesis de que la instrucción se ha dilatado en exceso. El tribunal, para evitar nuevos retrasos al final de este caso, dictaminó ayer que el Frente Cívico-Somos Mayoría de Julio Anguita, una asociación de izquierdas, y el sindicato de funcionarios Manos Limpias, inclinado hacia la extrema derecha, compartan el mismo abogado.
Frente Cívico ha sido la última parte en personarse en la causa por la presunta trama de desvío de fondos públicos. Lo hizo como acusación popular, el mismo papel que representan Manos Limpias y el Partido Popular y que han querido ejercer otras entidades y personas excluidas del proceso.
Frente Cívico designó su abogado y procurador, pero hace unos días el letrado dimitió por desavenencias con su representado. Antes de dejar el caso, adelantó sus planes: encargar un nuevo informe pericial para tratar de rebatir las tesis de la Agencia Tributaria que ha exculpado de delito fiscal a la infanta Cristina; elaboración de un dictamen pericial caligráfico sobre una firma obrante en el sumario, que se requieran las actas de la empresa Aizoon, la consultoría cuya propiedad comparten al 50% los duques de Palma, y otras nuevas pruebas.
La fiscalía anticorrupción y Manos Limpias pidieron que Frente Cívico compartiera abogado con la segunda.
Manos Limpias fue más lejos: trató de conseguir que el juez Castro no admitiese como acusación a la entidad de Julio Anguita, a la que acusó de actuar por oportunismo y buscar réditos en los medios de comunicación.
Fin de la instrucción
El magistrado José Castro permitió la personación de Frente Cívico con sus respectivos abogado y procurador porque entendía que su línea ideológica no era en nada coincidente con la de Manos Limpias.
El juez se preguntó también, retóricamente, cómo iban a compartir abogado las dos acusaciones populares, si la más veterana se oponía a la personación de la novel.
La decisión del instructor fue recurrida por el fiscal Pedro Horrach y la letrado de Manos Limpias Virginia López Negrete ante la Audiencia, que ayer les dio la razón.
El tribunal destaca que el juez Castro está a punto de dictar el auto de fin de instrucción (el pase a procedimiento abreviado), donde se recogerá quiénes de los 43 actuales imputados siguen como encausados, para pasar después a acusados, y quienes son exculpados.
En este contexto las nuevas pruebas que Frente Cívico planea solicitar (y sobre las cuales ya se ha investigado lo suficiente) “pueden dar lugar a dilaciones indebidas, en una causa ya dilatada en exceso y cuya instrucción sería recomendable (que) fuera ya concluyendo, para dar paso a la fase intermedia (la apertura de juicio oral)”.
Por otro lado, Manos Limpias ha recurrido ante Castro la oposición a imputar de nuevo a Iñaki Urdangarin y Diego Torres.
