El pasado viernes se extendió por varias conselleries del Govern el rumor de que el vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló, podía arrojar la toalla, dimitir y volver a sus cómodas clases en la Universidad de les Illes Balears. La hostilidad interna, desarrollada por algunos pesos pesados del partido y consellers del propio Govern, está poniendo en el punto de mira al vicepresidente. Este periódico se puso ayer en contacto con Josep Ignasi Aguiló y negó de forma tajante que estuviera barajando dimitir: "No es cierto, estoy de todas todas dispuesto a seguir en el cargo", se limitó a decir. Asimismo, desde el Govern aseguraron que Aguiló "está más fuerte que nunca".
Pese a ello, el president Bauzá tiene sobre su mesa varios mensajes que le aconsejan un cambio en la dirección de su política económica y le proponen el relevo al frente de la principal macroconselleria de su Govern. Los recortes, el bloqueo de partidas presupuestarias y los retrasos en los pagos efectuados por Aguiló, están molestando a un sector importante del partido que se ve imposibilitado para desarrollar sus políticas. El titular de un importante departamento del Ejecutivo de Bauzá reconoció, a personas de su confianza, que están demasiado "encorsetados" por Economía. Criticó que luego son ellos los que deben dar la cara por los recortes en los pagos de facturas a proveedores y en ayudas a sectores económicos y a entidades.
El martes en el Parlament Aguiló anunció que los presupuestos para el 2012 no se presentarían el 31 de octubre, como marca la ley. Esta decisión fue entendida internamente como una debilidad del vicepresidente. Algunos dirigentes populares hicieron ver a Bauzá que con una mayoría absoluta de 35 diputados no se podía retrasar la presentación de unos presupuestos. Le advirtieron que esta decisión dejaba muy mal al partido que se ha pasado el último año acribillando a Antich por no presentar las cuentas del Govern en la Cámara. Aguiló apareció ante los medios para explicar la medida con un semblante abatido, fruto de la presión interna que está soportando.
A todo ello hay que unir la paralización del fondo de compensación municipal que ha dejado a los alcaldes de las islas, la gran mayoría son del PP, con las arcas municipales en números rojos.
Nuestro compañero Alberto Magro pudo constatar ayer, de fuentes de toda solvencia, que incluso los servicios jurídicos del Govern están cuestionando algunas decisiones tomadas por parte de la vicepresidencia Económica del Ejecutivo.
Esta amalgama de situaciones está disparando los rumores en el Govern ante un posible relevo al frente de Economía. No obstante, Josep Ignasi Aguiló, ayer se mostró enérgico y tajante a la hora de desmentir dichos comentarios que le sitúan en breve fuera de su Conselleria.
Gabriel Company, de tapas en Campos con séquito
El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Gabriel Company, acudió el pasado viernes al municipio de Campos a disfrutar de la noche de tapas que allí se celebraba. Company recorrió varios lugares gastronómicos con un numeroso séquito de personas, la mayoría familiares, pero también algún empleado de su Consellería.
Desánimo en el PSOE
Algunos históricos dirigentes socialistas reconocen que no saben si van a acudir a votar el próximo 20 de noviembre. La ilusión ante los resultados es mínima y todos auguran una estrepitosa derrota. Tampoco ha ayudado nada las elecciones digitadas de los candidatos isleños. Todo ello hace que exista desafección entre las filas socialistas y cunda el desánimo a la hora de buscar el voto.
