CASO RUBIALES

Rubiales también desoyó al presidente del COE: "Le dije a mi amigo que dimitiera"

Alejandro Blanco, principal apoyo institucional del suspendido presidente de la RFEF, lamenta que "hechos inaceptables e inapropiados distorsionen la imagen del deporte español"

Alejandro Blanco, presidente del COE, en rueda de prensa.

Alejandro Blanco, presidente del COE, en rueda de prensa. / Irina R. Hipolito / EP

Sergio R. Viñas

"Del tema Luis Rubiales, aquí hablo y aquí termino", cerró su rueda de prensa de este viernes el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco. Y antes de ese epílogo, el dirigente olímpico habló sobre su "amigo, para que nadie tenga ninguna duda" y sobre sus hechos "inapropiados, inaceptables, que no se pueden hacer y no se pueden consentir", a partir de una idea fuerza: "Le dije que tenía que plantear la dimisión".

Ha tardado nada menos que 12 días en pronunciarse Blanco, tiempo de espera que justifica con el argumento de que su "mayor defecto o mayor virtud" es que no explica lo que hace. Pero defiende que, en privado, lo hace. Y en este caso, lo hizo desde que el lunes de la semana pasada, Rubiales le telefoneó para pedirle consejo cuando estaba en la escala en Doha del vuelo Sídney-Madrid, antes de grabar el vídeo en el que defendió que en el beso no consentido a Jennifer Hermoso "no hubo mala intención por ninguna de las dos partes".

"Un gesto coherente"

"Hablé con él por teléfono varias veces y le planteé a mi amigo que tenía que hacer tres cosas: pedir perdón de verdad, explicar todo lo bueno que se ha hecho con el fútbol femenino y, lo siguiente, plantear la dimisión. Era un gesto coherente y el mejor para mostrar arrepentiento", explicón Blanco. La última vez que le recomendó el cese, según su relato, fue el jueves previo a la asamblea de la RFEF, cuando le dijo a su equipo de colaboradores que, en efecto, dimitiría. Desde entonces, asegura Blanco, no ha vuelto a hablar con su amigo.

"Cuando hay un problema, primero lo intento solucionar y es lo que he hecho esta vez, intentando intervenir personalmente con él. No estoy en ninguna carrera por ser el primero en hablar o condenar", ha justificado sobre su silencio durante todos estos días de incesante tormenta, defendiendo que la dimisión "era lo mejor para él mismo, para el fútbol español y para el deporte español".

Las 17 medallas en Mundiales

Del mismo modo, ha lamentado que el caso Rubiales haya quitado foco al éxito del Mundial femenino y al conjunto de 17 medallas en campeonatos internacionales conseguidas por el deporte olímpico español este verano: "Me duele que estos acontecimientos hayan difuminado los grandes éxitos de nuestros deportistas y nuestras deportistas. No puede ser que un hecho aislado le quite protagonismo y nos dé una mala imagen que no merecemos".

"Estos éxitos me hacen defender con vehemencia las estructuras del deporte español, también las federativas", ha continuado, valorando la presencia de dirigentes españoles en las federaciones internacionales de diferentes deportes, así como en el Comité Olímpico Internacional.

Cuando Blanco defendía a Rubiales

Blanco siempre ha sido el gran valedor de Rubiales en el entramado institucional del deporte español. De hecho, en la asamblea general de la RFEF en 2022, semanas después de que estallara el escándalo de las comisiones cobradas por Piqué por llevar la Supercopa a Arabia Saudí (entre otros y numerosos temas), el presidente del COE fue el único cargo institucional de relevancia que se presentó en Las Rozas.

"Estás haciendo un gran trabajo, más allá de las tormentas que puedan pasar, que ocurren cada año en todos los deportes. Manifiesto, para que quede claro, mi apoyo y mi respeto a ti y a todo tu equipo y confío plenamente en la gestión que estáis haciendo en el fútbol español. Que nadie tenga ninguna duda", expresó entonces, hace más de un año, desde la platea Blanco, en una asamblea a la que fue invitado por protocolo, al igual que la FIFA, la UEFA y el Gobierno, tres instituciones que eludieron expresamente acudir a Las Rozas.