Suspendido el trofeo ‘La Beata’ de Santa Margalida por la tormenta

Unos minutos después de las once de la mañana las condiciones atmosféricas provocaron la suspensión del trofeo ciclista ‘La Beata’ que se estaba disputando en Santa Margalida con motivo de sus festejos populares. La matinal de ciclismo se había iniciado poco después de las nueve de la mañana sobre un circuito urbano de 1.300 metros en cada vuelta con la meta ubicada en la Plaça Major, el escenario habitual. Un trazado de dificultad considerable por su sinuosidad e inclinación.

Después de las competiciones para cadetes, infantiles, alevines, principiantes y promesas y de la correspondiente entrega de premios se había iniciado la prueba para masters y féminas, quienes por su baja participación compitieron conjuntamente a la distancia de 15 vueltas con un total de 29 contendientes, ocho de los cuales, de la categoría femenina. Después del primero de los esprints de bonificación que se disputaban cada cinco vueltas el cielo oscureció de forma severa. Incluso se encendieron las luces del engalanado festivo de la plaza para que el jurado técnico pudiera ver con claridad el dorsal de los participantes.

La tormenta siembra el caos en Mallorca

El grupo inicial había quedado desmenuzado. En cabeza, un grupo de cuatro unidades donde Ramón Ros llevaba la batuta. En categoría femenina, Nuria Tauler ejercía un neto dominio ante sus paisanos. Con este escenario y en un par de minutos el viento tomó una fuerza desmesurada y la lluvia arreciaba, mientras que los miembros de la organización intentaban sujetar tanto las carpas habilitadas como el arco de meta que ya había roto las sujeciones y cuerdas. Los asistentes de refugiaron en los bares del entorno mientras se iban desmontando rápidamente los equipos de sonido e informáticos.

Ante este espectacular escenario, no quedaba otra que la obligada suspensión que decidieron conjuntamente los organizadores y el jurado técnico. Tal como puede observarse en la imagen que acompaña esta información, la plaza quedó desolada, con la única presencia de quienes intentaban poner orden en el auténtico desaguisado que las inclemencias del tiempo habían provocado.

Lluc Dols, el mejor cadete

La prueba para cadetes que abrió la programación, con 12 contendientes y a la distancia de 15 vueltas tuvo a Lluc Dols, del Saxun, como gran protagonista. Después de la primera vuelta lanzó su ofensiva y se marchó en solitario hasta alcanzar el final de carrera después de doblar a 8 de sus rivales. La segunda plaza fue para Joan Miquel Bover seguido de Joan Morlà. Destacar que Joan Riutort debió conformarse con la cuarta plaza después de una caída sin consecuencias que le dejó sin opciones de podio. Andreu Barceló completó la nómina de los cinco mejores.

La carrera para infantiles, con 16 participantes para cubrir diez vueltas estuvo marcada por la pugna que mantuvo el ganador, Toni Bordoy, con Lluc Mascarell que se resolvió por el escaso margen de tres segundos con Izán Baidez en el tercer escalón seguido de Nino Fernández que también se vio perjudicado por una caída. En las féminas, dominio neto de Marina Seguí que siempre anduvo por delante de sus oponentes. Le acompañaron en el podio, Emma Schwarma y Nuria Serra.

Escasa participación en categoría alevín. Prueba que se resolvió con el triunfo en solitario de Miquel Àngel Vicens que superó a Francesc Martorell y Sergi Martorell, mientras que Laia Fernández fue la mejor de las niñas. También se realizaron pruebas no competitivas para principiantes y promesas con siete y nueve inscritos respectivamente en la competición ciclista que cierra el capítulo de pruebas en circuito urbano de la presente campaña.