A Miquel Pons le han bastado tres carreras en el Mundial de motociclismo para sumar su primer triunfo. El piloto de Campanet, que este año ha debutado en motos eléctricas, ha reconocido esta mañana que la primera posición en Montmeló “fue una vitoria muy importante” para él y su equipo. “Esperamos poder conseguir más, lo que está claro es que este primer puesto nos mete de lleno en la lucha por el campeonato”, ha reconocido.

El piloto del LCR E-Team esta mañana ha compartido protagonismo con Augusto Fernández en el hotel Nivia Born Boutique del centro de Palma. Pons no ha ocultado su felicidad tras subirse al primer escalón del podio el pasado domingo en Barcelona y ha analizado su trayectoria, hasta el momento, en el mundial de MotoE: “Empezamos en Jerez bastante bien, con una quinta posición que fue bastante buena teniendo en cuenta que salíamos desde bastante atrás. En Francia las cosas no fueron tan bien. Pese a que salíamos desde una muy buena posición, tuvimos un problema y no pudimos puntuar y en Montmeló hemos podido alzarnos con la victoria. Es un triunfo muy importante que nos ha permitido colocarnos cuartos de la general, a no muchos puntos del primer clasificado. Seguramente podamos luchar por el campeonato”.

Pons ha reconocido que en el Mundial de motos eléctricas los fallos se penalizan, si cabe, más que en el resto de cilindradas. “Son muy pocas carreras, esperemos que en un futuro haya más y el tema de las vueltas, es verdad que son muy pocas. Hay que estar muy concentrados en todo momento y no se puede hacer ningún fallo. Al mínimo error hay muy pocas posibilidades de remontar. Es una categoría que exige mucha concentración”, ha resumido.

El mallorquín ha señalado que “ahora mismo” solo tiene en mente su participación en la categoría de motos eléctricas, pero que su ilusión sería poder formar parte, un día de un equipo en Moto2: “Estamos trabajando aquí y solo tenemos en mente la MotoE, pero lógicamente el objetivo es poder pasar a Moto2 y tener una plaza fija ahí”. Pons que debutó en la categoría intermedia en Portimao para cubrir la baja del lesionado Simone Corsi, ha señalado que ese fin de semana “fue complicado”, pero lo pasó “bien”. “La carrera en la que me probé en Moto2 fue difícil, pero lo pasamos bastante bien. Era un fin de semana en el que solo tuvimos un día para adaptarnos a la moto, pero creo que para el poco tiempo del que dispusimos, las cosas salieron bastante bien”, ha indicado.

Miquel Pons era un gran amigo del recientemente fallecido Jason Dupasquier. En el podio de Montmeló le dedicó la victoria a su compañero: “Compartí dos años de equipo con Jason y también estuvimos viviendo una temporada juntos en Cartagena y eso crea muchos vínculos. La verdad fue una pena y me gustó mucho poder dedicarle la victoria a él. Es normal que los pilotos corran en esas circunstancias. Este es un deporte que conlleva estos riesgos. Son cosas muy tristes, pero hay que superarlo. Duele mucho y más cuando es un amigo tuyo, pero nuestro trabajo es salir a la pista y no pensar en ello”.