P ¿Por qué entró en Projecte Home?

R Yo no hubiera entrado. "Esto no va conmigo", pensaba yo. Tras la primera terapia, me dije: "¡Qué me estáis contando!" No fui yo el que decidió entrar en Projecte Home. Me trajeron.

P ¿Cómo le convencieron?

R "Pep, tienes un problema", me dijeron. Yo quedé en silencio, y dos segundos después, solté: "Sí". "Mañana vamos a ver a Projecte Home", añadieron. Empecé a temblar de miedo. Conocía Projecte Home de entrevistas. De hecho, el día antes de entrar había entrevistado a Bartomeu Catalá, al que no le comenté nada.

P ¿Cómo venció ese miedo inicial?

R Dando un paso al frente. Descubrí que realmente tenía un problema. Yo había dejado de consumir pero siempre volvía. Las drogas son muy fáciles de dejar? un día? la putada es no volver a consumir. Yo pensaba que controlaba, porque dejaba las drogas tres semanas, y no me pasaba nada. Ahora lo entiendo porque en Projecte Home me han dado las herramientas para entenderlo. Cuando me dijeron que tenía un problema, les creí.

P ¿Quién se lo dijo?

R Familiares y amigos. Me giré y vi a mi hijo Jordi, en el coche, con dos añitos, y me dije: "Se acabó".

P ¿Cuánto tiempo ha necesitado para rehabilitarse?

R En Projecte Home he estado 18 meses, en el programa Just a Temps. Venía dos veces a la semana, y los últimos seis, un día a la semana a una terapia de grupo. Tras 18 meses, sigo con mis barreras, me las pongo, y no me suponen ningún esfuerzo. Para salir de las drogas necesitas ayuda.

P ¿En estos 18 meses ha sentido alguna vez el deseo de volver a consumir?

R No han sido tentaciones de querer consumir sino pensamientos, como el hecho de pasar por una calle y saber que allí hay gente con la que antes estabas. La adicción es una enfermedad y si te quieres curar te tienes que poner límites. Yo me he dado muchas hostias emocionales.

P ¿Qué mundo ha descubierto en Projecte Home?

R Me he encontrado con realidades como puños. En Projecte Home he encontrado la vida. Desde el primer momento en que entras, ya no hablas de drogas. Aquí se habla de un proyecto, de persona, de lo que tú quieres hacer a partir de ahora, ya sin consumir, jugar a máquinas, ser adicto a comprar? La mentira, la irresponsabilidad y el trapicheo están detrás de todos estos comportamientos.

P ¿Qué le llevó hasta la droga?

R El probar, y no fue con la música, fue en mi época de jugador de fútbol, un deporte que amaba. La cuestión es con quién te relacionas. No fue por la música aunque aquello de "sexo, drogas y rock&roll", esa actitud, me molaba de joven. Ahora el concepto ha cambiado. El sentirse acompañado, primero por uno mismo, es fundamental. Ahora hay luz.

P ¿Por qué no se ponen todos los focos sobre las drogas, que sitúan a España como el segundo país europeo con más consumidores de cocaína?

R Porque la droga es una mentira. Tenemos un problema de base, la visualización. España es un país hipócrita. La sociedad tendría que visualizar esta problemática. Todos conocemos la droga, y es tan fácil llegar a ella. Bastan dos llamadas o ir a un sitio donde sabes que te lo van a ofrecer, ni siquiera hay que buscarla.

P Vuelve a sonreír.

R Puede no ser políticamente correcto, pero por culpa de esa adicción, ahora me siento bien. Yo lo puedo contar, otros no. Soy feliz y me he reencontrado a mí mismo.

P ¿Se siente renacido?

R Sí, he vuelto a ser el yo de hace muchos años.

P ¿La música le ha servido como terapia?

R Sí. La creatividad se me dispara en Projecte Home. Al acabar las terapias llegaba a casa hecho polvo, por aquello que quería afrontar. Como personas somos unos cobardes porque nos da miedo conocernos. Yo no empecé siendo honesto en Projecte Home. No lo contaba todo. Tardé en darme cuenta de que quería cambiar.

P ¿Lloró componiendo este Equilibrista Emocional

R Aún lloro cuando las canto. Las canciones salieron solas. Por primera vez canto temas que me los creo. El disco es cronológico y condicional. Antes de cada tema, lo explico. El álbum arranca con Tenc por y concluye con El vals de na Maria. En Projecte Home puedes entrar solo, pero sales acompañado, y de eso habla esa última canción. Para el disco también he necesitado compañía, de amigos, y no me han fallado.