El departamento de Medio Ambiente del Consell de Mallorca ha iniciado los trámites con el fin de modificar un decreto del año 2004 mediante el cual se podrá prorrogar la caza del tordo y otras especies cinegéticas hasta el mes de febrero. Así lo ha comunicado la consellera ejecutiva Catalina Soler al alcalde Sóller, Carlos Simarro, a través de una carta en la que ya le anuncia que los trámites para conseguir que esta modificación esté vigente en la próxima temporada de caza.

La normativa que se modificará es el decreto por el que se declaran las especies de caza y pesca fluvial en las Balears, de manera que se puedan cumplir los requisitos técnicos y jurídicos necesarios para autorizar la caza en el mes de febrero.

Esta comunicación remitida por Soler es la respuesta que ha dado la consellera ejecutiva a los ayuntamientos de Valldemossa, Sóller y Fornalutx que el pasado mes de enero solicitaron prorrogar la temporada hasta mediados de febrero para los aficionados que usan las artes tradicionales de los filats.

Estas peticiones se venían realizando en años anteriores en función de la evolución de la temporada de caza.

Las peticiones cursadas este año por los tres municipios han sido rechazadas, por lo que no ha sido posible la prórroga para la caza de tordos con redes. Uno de los motivos que justificaron era que los zorzales ponían en riesgo o causaban daños a las explotaciones agrícolas, en especial a las dedicadas al cultivo del olivo, un hecho que los inspectores de medio ambiente han descartado mediante su informe previo.

El informe final con el que se rechaza la prórroga sostiene que la única forma de poder alargar la temporada hasta más allá del último domingo de enero es mediante la modificación del decreto del año 2004, cambios que el Consell de Mallorca ya ha puesto en marcha para que estén en vigor en la próxima temporada de caza.