La asamblea 'Ciutat per a qui l'habita, no per a qui la visita' ha clausurado simbólicamente esta mañana la conselleria de Turismo, a la que responsabilizan de la masificación, del descontrol en el alquiler turístico y de no preservar el derecho a la vivienda, entre otros pecados asociados a la actividad turística en temporada alta en las islas.

Una docena de representantes de esta asamblea ciudadana han simulado el precinto de la sede del departamento que dirige Biel Barceló en la calle Montenegro pegando un cartel en la puerta principal, cerrada al público al ser sábado.

Una portavoz, que ha preferido no identificarse, ha leído un comunicado en nombre de este movimiento cívico en el que se "corresponsabiliza" a la conselleria de "la situación de masificación, mercantilización y destrucción del territorio" de Balears.

Asimismo, acusan al departamento de Turismo de "complicidad por ineficiencia y/o omisión del masivo desarrollo de actividades ilegales como el alquiler turístico en edificios plurifamiliares".

Finalmente, afean a la conselleria su "apuesta por dar prioridad a la actividad económica ante derechos sociales fundamentales como el derecho a la vivienda o el derecho a la ciudad, entre otros".

'Ciutat per a qui l'habita, no per a qui la visita' suele aderezar con una pizca de humor sus actos de denuncia contra los excesos derivados del turismo. Hace dos semanas protagonizaron un 'vermut' en el Born para recuperar por unas horas un espacio que, consideran, ha sido arrebatado a la ciudadanía para entregárselo a los turistas.

En mayo desfilaron por el centro de Palma por un 'carril guiri' para denunciar la masificación que sufre la ciudad en temporada alta.

La acción de ´Ciutat per a qui l´habita´ se produce en plena polémica por la aprobación de la Ley Turística que debe regular el alquiler en los pisos y que ha desencadenado una nueva crisis entre Podemos y sus socios del Pacto PSIB y Més.