"Please, don´t come", le suplicaba Magdalena Barceló a una turista inglesa este mediodía en Palma. Esta vecina del Molinar, como otras muchas personas, hasta superar las 200, se han vestido este sábado como auténticos guiris para manifestar su hartazgo y los problemas que genera la llegada de millones de turistas y el alquiler de pisos.

La plataforma Ciutat per a qui l'habita, no per a qui la visita había convocado una marcha desde Cort a la plaza de'n Coll para inaugurar el 'carril guiri'. Los participantes tan solo debían acudir ataviados con ropa de turista y una maleta de ruedas con el objetivo de hacer el máximo de ruido. Y así lo han cumplido muchos vecinos, no solo del centro de Palma, sino de otras barriadas.

"Esto no es Disneyworld, esto no es un parque turístico" ha sido otra de las afirmaciones que se han podido escuchar durante el recorrido del carril guiri, seguido por esas más de 200 personas que entre proclamas de "paella" y "balconing" y parodias de cruceristas estrenados, han hecho mucho ruido, llamando la atención de los propios turistas y provocando aplausos de residentes.

La plataforma convocante ha anunciado que habrá más acciones colectivas con el objetivo de "recuperar la ciudad de las manos del colonialismo turístico y sus agentes invasores".