El secretario general del sindicato de enfermería (SATSE) en Balears, Jorge Tera, estimó ayer que en estos momentos faltarían unas doscientas profesionales en todos los niveles asistenciales del Servei de Salut para dar una adecuada cobertura sanitaria en estos meses de verano.

"Durante el verano surgen necesidades por bajas, fallecimientos o traslados que no están cubiertas. Y no damos abasto", denunció Tera, que reiteró que en estos momentos, con el verano ya mediado, faltarían unos doscientas enfermeras para "empezar a trabajar ya".

Sobre qué servicios asistenciales estarían sufriendo mayores "agujeros", el líder sindical de este colectivo apuntó genéricamente a "los servicios con mayor nivel de especialización para los que resulta más complicado hallar profesionales".

También lamentó Tera que el listado definitivo de enfermería de la bolsa única del Servei de Salut, publicado el pasado 23 de junio con 5.000 aspirantes admitidas, "ya esté agotada".

Y este agotamiento no es consecuencia de que se hayan producido 5.000 nuevas contrataciones sino porque la inmensa mayoría de las aspirantes han rechazado las ofertas de trabajo por varios motivos. Porque ya están trabajando con unos contratos de más larga duración que los que les han ofrecido para este verano, circunstancia en la que se encontrarían dos mil de las cinco mil integrantes del bolsín.

Porque ya tienen contratos de corta duración, sobre todo en temporadas "punta" como el verano, lo que no permite volver a ofrecerles un contrato hasta la finalización del actual, situación en la que se hallarían unas mil enfermeras. O, por último, porque unas 2.000 profesionales de este bolsín son de fuera de las islas y no aceptarían la oferta porque los contratos son precarios, por los problemas de vivienda que hay en las islas y por las dudas que genera la legislación vigente y la posibilidad de que, en caso de una posible renovación, se les exija como requisito la certificación de conocimientos lingüísticos de catalán (B2).

Lista subsidiaria

Esta escasez de trabajadoras, reveló Tera, ha obligado al IB-Salut a confeccionar una lista subsidiaria con doscientas nuevas candidatas en la que habría incluido a las enfermeras graduadas este año en la UIB.

La situación es tan desesperante que en ocasiones los hospitales de Son Espases y Son Llàtzer se "roban" enfermeras. Llaman a una candidata y si ésta ya tiene una oferta del otro hospital, le ofrecen más meses de contrato para que se vaya con ellos, denuncia el SATSE. Preguntado por estas disputas, el director general de Recursos Humanos del IB-Salut, Gabriel Lladó, no descartó que hayan pasado, aunque en situaciones puntuales, matizó.

Ante esta situación el SATSE reclamó que se convoquen oposiciones, que se ofrezca empleo más estable y de calidad, que se publicite institucionalmente el Servei de Salut y el relevante papel que juegan las enfermeras en él, que se incentive la llegada de estas profesionales y que se posponga el requisito del catalán hasta tener las necesidades cubiertas todas las épocas del año.

Lladó aseguró que todas estas peticiones se están cumpliendo y, respecto al requisito del catalán, recordó que en la actual bolsa el conocimiento de la lengua se ha valorado como mérito y que "por no saber catalán no se va a dejar de contratar a nadie, ni ahora ni en el futuro".