José Ramón Bauzá estuvo ayer en Madrid. Visitó el número 13 de la calle Génova, sede central del Partido Popular, y habló con Carlos Floriano. Según las fuentes consultadas, Bauzá negoció su salida de Balears como senador autonómico que elige el Parlament y que se integra en el grupo parlamentario popular de la Cámara Alta. "Es la salida más digna para él", indicaron fuentes cercanas a la cúpula del PP de Balears. El pasado sábado este periódico ya adelantó la estrategia de Bauzá para acabar la pugna que vive el partido con un amplio sector pidiendo su cabeza. Quería ganar tiempo para asegurarse un cargo en Madrid y desaparecer de la escena insular.
En Madrid, el todavía president del Govern y del PP también fue llamado al orden. Carlos Floriano le ordenó que suspendiera cualquier posibilidad de celebrar un congreso extraordinario para elegir a su sucesor después del verano. Génova no quiere ninguna cita congresual antes de las elecciones generales.
El pasado martes, en la junta directiva regional, Bauzá anunció el congreso extraordinario en septiembre. En realidad, según su entorno, el president tenía el visto bueno del propio Carlos Floriano, vicesecretario de organización del partido. Lo que ocurrió es que detrás de Bauzá anunciaron su marcha los presidentes de Valencia, Alberto Fabra, y de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, y ello encendió las alarmas en Génova 13. Tomaron la decisión de no permitir ningún congreso hasta después de la cita electoral de noviembre. Por ello, ayer Floriano se mostró tajante al anunciar que había comunicado de forma clara que no se celebraría el congreso que había anunciado Bauzá en Balears.
En Madrid, después de escuchar de boca del número dos de María Dolores de Cospedal la negativa a su relevo congresual, planteó la posibilidad de encontrar una salida digna para él.
Tal y como se apuntó el pasado sábado en este periódico, las posibilidades de conseguir un cargo en el Gobierno es de poco recorrido al estar cerca las elecciones generales. Además, las bajas expectativas electorales del PP no aconsejan que sea el cabeza de cartel por Balears. Una de las únicas posibilidades que le quedan es apostar por el senador autonómico, un cargo que otorga el Parlament y habitualmente se reparten uno para el PP y otro para las fuerzas de la izquierda. Bauzá tiene todos los número de seguir el mismo camino que eligió Francesc Antich tras su derrota en 2011.
Cerrar la crisis en una semana
Los barones y los alcaldes del PP están convencidos de que esta semana se cerrará la crisis que vive la formación. Ello pasará por clarificar primero el futuro de José Ramón Bauzá, su marcha inmediata de la presidencia del partido y la puesta en marcha del proceso para constituir una junta gestora que se encargue de dirigir el PP hasta el congreso extraordinario, que podría celebrarse el próximo mes de enero o febrero.
Los barones aseguran que esta cuestión quedará clarificada antes del próximo viernes. Incluso algunos apuntan que José Ramón Bauzá podría no recoger el acta de diputado si tiene asegurada su elección como senador autonómico. De todas formas, esta cuestión no está del todo clara y tal vez Bauzá no suelte el acta hasta su nombramiento para la Cámara Alta. Sería su salvoconducto para conseguir su propósito de marcharse a Madrid dada la auténtica guerra interna que vive el Partido Popular de Balears.
Un destacado barón popular aseguraba ayer que Bauzá "sabe que puede hacer su última contribución al partido" marchándose de presidente del PP esta misma semana y facilitando la gestora provisional hasta la cita congresual de 2016. El grupo parlamentario también deberá elegir un portavoz si Bauzá abandona para aterrizar en el Senado.
Hoy está previsto que el Parlament entregue las actas a los diputados elegidos en los comicios del pasado 24 de mayo. Podría ser una buen momento para conocer las intenciones de Bauzá. En caso de no recoger su acta, todo apuntará a que su marcha definitiva de la escena política de Balears será cuestión de horas. Si la recoge habrá que esperar a lo que ocurra en los próximos días.
