El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, José Castro, prevé solicitar al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) continuar cinco años más en el cargo para poder concluir las distintas investigaciones de corrupción que se encuentra instruyendo. De este modo, pese a que al cumplir el próximo mes de diciembre 70 años deberá por Ley acceder a la jubilación, Castro tiene ante sí la posibilidad de continuar hasta los 75 como magistrado emérito.

Fuentes judiciales han precisado a Europa Press que el juez, quien desde hace más de cinco años se encarga de la instrucción del caso Palma Arena -en cuyo seno nació la causa que indaga la presunta trama de desvío de fondos públicos a través del Instituto Nóos y en la que se encuentran imputados la Infanta Cristinta y su marido, Iñaki Urdangarin-, deberá solicitar la prórroga como mínimo seis meses antes de que, el 20 de diciembre, cumpla 70 años.

Se trata de una posibilidad contemplada por la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), que establece en su artículo 200.4 que los miembros de la Carrera Judicial jubilados por edad que sean nombrados para continuar en su puesto tendrán la consideración y tratamiento de magistrados eméritos, una situación en la que podrán permanecer hasta los 75 años con el tratamiento retributivo de los magistrados suplentes.

De este modo, Castro estaría adscrito como juez de refuerzo al Juzgado del que ahora es titular, una vez el CGPJ convoque y proponga el nombramiento del magistrado que ocupe su vacante por jubilación. Antes de ello, deberá cursar su solicitud ante el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB), que será el encargado de remitir la petición al CGPJ. Será la Comisión Permanente de este órgano la que tendría que acordar el nombramiento como magistrado emérito.

Una vez designado como tal, Castro no estaría obligado a agotar el plazo hasta los 75 años, puesto que podrá retirarse antes en caso de que hubiese finalizado la instrucción de las pesquisas pendientes.