El dragón Pep, el amarillo, y la dragona Montse, la azul, han atraído este domingo a cientos de espectadores a la plaza de Pere Garau, donde se ha celebrado la jornada festiva del Año Nuevo Chino, la fecha más importante en el calendario oriental.

Los serpenteantes movimientos de ambas figuras, al ritmo de la tamborilera Eva, han sido el acto central de un día para celebrar "la diversidad y riqueza que aporta a la ciudad” la comunidad china residente en Palma, en palabras del director de la asociación que los representa, Achinib.