Palma se llenó de miles de personas con ganas de ver de cerca el tradicional Correfoc que da fin a las fiestas de Sant Sebastià

En esta ocasión la festividad contó con la participación de hasta siete grupos de dimonis y cuatro ‘bèsties de foc’, que desplegaron su arte flamígero durante todo el recorrido hasta llegar a la Plaça de la Riena, donde las bèsties ofrecían una exhibición pirotécnica marcado por el fuego y el juego con las sombras. Mientras los dimonis iban llegando, una batucada animaba a quienes se congregaban en la plaza.