"El turismo de golf está creciendo en todo el mundo menos aquí"

Los 25 años dirigiendo el Real Golf de Bendinat acreditan a Jorge Pando para analizar con precisión el turismo de golf en la isla. Un destino que tiene un gran potencial para dicha práctica. "No es un deporte de ricos", defiende el hasta ahora director del golf de Bendinat. "Una partida es más barata que una entrada de fútbol". Mallorca empieza a ser vista como destino turístico de golf, un turismo que puede ayudar a lograr la tan deseada desestacionalización. Para ello, es necesario que todo el sector turístico balear aúne esfuerzos para promocionar las ventajas de esta isla como destino de este deporte: diversidad de campos a poca distancia. El factor clima también atrae a los europeos. Tiene claro que 22 campos de golf, por ahora, son suficientes. Son Baco, Son Bosc... cada vez que se habla de construir nuevas infraestructuras surge la polémica. ¿Su explicación? "Los políticos tienen miedo a la palabra golf".

– ¿Existe un gran potencial de crecimiento en la práctica del golf en la isla?

– El potencial existe. Tenemos 8.000 federados, aunque con la crisis se han registrado algunas bajas. El potencial de turistas de golf es brutal, está creciendo por todo el mundo menos aquí.

– ¿Por qué?

– Porque no se hace promoción y la que hay no es la adecuada. Es la misma que hace 25 años. También ocurre con los hoteles. Es necesario adaptarse a las nuevas tecnologías. Turquía está apostando muy fuerte, construyendo nuevos campos de golf. Cuando hablamos de Mallorca es difícil concretar en un sector porque se debe cuidar todo: campos de golf, hoteles, restaurantes, aviones... La visión debe ser global y aquí cada uno mira su parte.

– ¿Esta es la clave?

– Hay que enfocarlo como un todo, ya que hablamos de la industria más importante de Balears. En Turquía se están construyendo muchos hoteles y los viejos desaparecen. Pero aquí solo quedan los viejos. Hace unos años, los hoteleros presionaron para que no se construyeran más. No tenemos material nuevo que ofrecer. El turismo de ahora no quiere solo sol y playa, quiere gastronomía, cultura... Ahora estamos dentro del círculo vicioso del todo incluido. Soy un defensor del todo incluido, pero del todo incluido de los cruceros de lujo, que pagas por un servicio increíble. Pero el cliente del todo incluido que se ofrece en la isla no sale del hotel porque no tiene poder adquisitivo. Y el Govern no hace nada para evitarlo.

– ¿El Govern no apuesta por el turismo de golf?

– No. Son seis partidos que están en el Govern y cuatro de ellos odian el golf a muerte. Y para los hoteleros el golf no cuenta. Si tenemos 20 campos, con una media de 200 jugadores diarios. Este deporte atrae a 4.000 turistas que si vienen acompañados son 8.000 personas. Para los hoteleros esta cifra es insignificante. La diferencia es que el jugador de golf gasta diez veces más que el turista de masas. Ha habido muchas discusiones. Si hay 150.000 turistas de golf multiplicado por diez, el resultado es que estos gastan como 1,5 turistas de masa. Hay que combinar los tipos de turismos. Mallorca no ofrece suficiente para el turismo de alta calidad. El golf no es la gallina de los huevos de oro pero es una gran ayuda, como es el cicloturismo y el turismo náutico. Éstos forman parte de un turismo de calidad pero no debemos prescindir del turismo de masas.

– ¿Falta implicación institucional?

– Nunca he visto que los ayuntamientos que tienen campos de golf o el mismo Govern tengan un asesor que entienda de esta materia. Como todo es política, dan cargos a quien interesa

– ¿Qué puede ofrecer Mallorca como destino turístico de golf?

– Tienes 20 campos de golf en distancias muy cortas, como mucho a una hora de coche. En Calvià tienes ocho a tu disposición en menos de 40 minutos. Y en el resto de la isla, el más lejos está a 80 kilómetros. Si Bendinat está lleno, puede ir a otro en menos de quince minutos de coche. Además, los campos son muy diferentes lo que permite tener una gran variedad. Un día puedes jugar en un terreno llano, otro en uno montañoso, otro cerca del mar y otro en el interior. Es una gran ventaja. En la península, hay 200 kilómetros de un campo a otro.

– Hay 22 campos. ¿Son suficientes?

– De momento, bastan. A no ser que se haga promoción intensiva y se traiga más gente. Hasta 20 campos está bien. Tener más campos depende de la demanda. Hay que mantener el equilibrio. Si se apuesta por tener más campos se debe estudiar cómo captar más clientes como lo hacen los otros destinos.

– ¿Por qué cree que la creación de nuevos campos siempre levanta polémica?

– Los políticos tienen miedo a la palabra golf. Siempre han estado en contra alegando que es un deporte de ricos, que no es verdad. Si nos paramos a pensarlo, ocurrió lo mismo con el tenis y la náutica que hoy en día está al alcance de todos. Dicen que el golf es caro pero vale menos una partida de golf que una entrada de fútbol.

– ¿En qué posición está la isla como destino de golf?

– En la parte baja. Afortunadamente ya empiezan a verla como destino de golf.

– ¿Es clave para lograr la tan deseada desestacionalización?

– Las temporadas de golf van cruzadas a la de sol y playa porque empiezan a finales de septiembre hasta noviembre. Marzo, abril y mayo son meses muy fuertes. Además hay que tener en cuenta que los campos de golf del norte de Europa están cerrados por la nieve. Sin embargo, este invierno se han tenido que anular reservas porque no había ningún hotel abierto cerca del campo de golf. Hablo del Port d´Alcúdia. Esperemos que este año no ocurra lo mismo.

– ¿El golf es un deporte elitista?

– Siempre se ha considerado un deporte de ricos pero no es así. Por ello, la promoción del golf es muy complicada porque siempre que hemos solicitado ayuda se nos ha denegado por esta razón. De los turistas que vienen a Mallorca, el golf abarca entre un 10 y un 12%. El golfista está toda la semana en un hotel pero juega en distintos campos de la isla. Todos los sectores deberían apoyar la promoción del golf porque se benefician de este perfil de turista. Hace falta una promoción más fuerte y bien dirigida. Es esencial aprovechar las nuevas tecnologías.

– ¿El golf interesa a los mallorquines?

– Sí. Es un deporte que engancha, es muy sociable. Es un paseo muy agradable. Además, no tiene edad. Juegan desde niños a mayores de 80 años.

– Ninguna ley regula los campos de golf.

– En los años 90 hicieron una ley de campos de golf. Fuimos la primera comunidad en redactarla. El problema es que la normativa no tenía reglamento y no servía para nada. Lo único que hemos conseguido es que Antich la derogara. Ahora los campos de golf están completamente indefensos jurídicamente.

– En 25 años en el golf de Bendinat ha visto jugar muchas personalidades. ¿Cuáles se defienden mejor?

– Michael Douglas juega bien. Los americanos tienen más idea. Adolfo Suárez fue una de las personalidades que más me impresionó. Es entrañable.

– El Golf Bendinat trabaja con personas con discapacidad. ¿Qué les aporta?

– Convencí al instituto de Bendinat para que incluyeran el golf en horario lectivo. En el centro hay un grupo de niños con discapacidad. Envié dos profesores a la Fundación de Sergio García para que aprendieran a dar las clases de golf a estos niños. El golf les aporta tranquilidad. Cuando se dan cuenta que pueden hacer algo, la cara se les ilumina porque se sienten útiles y físicamente les va bien. También hemos enseñado a jugar a golf a una niña ciega.