Absuelto el acusado de violar a una turista en una barca en Cabrera

La Audiencia aprecia contradicciones en la versión de la joven y descarta la «intimidación ambiental»

La Fiscalía y la acusación particular reclamaban una condena de 10 años de prisión

El acusado, durante el juicio en la Audiencia Provincial de Palma.

El acusado, durante el juicio en la Audiencia Provincial de Palma. / M.O.I.

Marcos Ollés

Marcos Ollés

La Audiencia Provincial de Palma ha absuelto a un monitor de buceo acusado de violar a una joven turista alemana de 18 años en la cubierta de una embarcación en Cabrera. El tribunal aprecia «contradicciones» en el relato de la chica, que aseguró y no aprecia que hubiera «intimidación ambiental». Las magistradas exculpan así al hombre del delito de agresión sexual, por el que la Fiscalía y la acusación particular reclamaban 10 años de prisión.

La sentencia considera acreditado que el acusado y la denunciante se quedaron a solas en la barca durante una excursión para realizar una inmersión y mantuvieron relaciones sexuales. La chica narró en el juicio que el hombre la forzó pese a su insistente oposición: «Le dije que no siete veces». Contó que sufrió un percance en su primera inmersión de aquel día y decidió permanecer en la barca durante el resto de la excursión, por lo que se quedó a solas en la embarcación con el monitor. "No cruzamos ni una palabra, no hubo flirteo. Él se sentó detrás de mí y me besó la nuca. Yo me asusté mucho. Me cogió la cabeza e intentó besarme. Yo puse la mano para apartarle. Le dije varias veces "no" y me fui a la otra punta del barco, pero él me seguía", detalló.

La joven ha relatado que el monitor la sujetó y ha insistido en que le pidió "siete veces" que parase. "Él quería bajarme el traje de neopreno. Yo tenía mucho miedo de caerme al agua", ha asegurado. Según su versión, el hombre acabó penetrándola contra su voluntad.

"Intimidación ambiental"

La sala, que resalta algunas «contradicciones» en el relato de la chica, no pone en duda su versión pero considera que no hay elementos suficientes para condenar al hombre. Las magistradas no aprecian que existiera una «intimidación ambiental» que anulara la capacidad de resistencia de la joven, pese a que la víctima la sintiera por la diferencia de edad y el escenario, una embarcación fondeada en Cabrera sin barcos alrededor.

La sentencia puede ser recurrida ante el Tribunal Superior.