Un joven español de unos 25 años fue arrestado el miércoles por la Policía Nacional como presunto autor del incendio que el pasado día 1 de octubre destruyó la casa de su exsuegro en Son Sardina, en Palma. El joven culpaba al hombre de haber provocado el fin de su relación de pareja y le había amenazado. Cuando se declaró el fuego no había nadie en el domicilio, por lo que no se produjeron daños personales, si bien el interior de la casa quedó totalmente arrasado y se desplomó parte del tejado.
El incendio se declaró sobre la una y media de la madrugada del 1 de octubre en una casa ubicada a la altura del kilómetro 5,4 de la carretera de Sóller, en la entrada de Son Sardina. Cuando llegaron al lugar las primeras dotaciones de los Bombers de Palma las llamas ya se habían extendido por todo el inmueble. Los bomberos estuvieron trabajando hasta las tres y media de la madrugada para sofocar las llamas, aunque no pudieron evitar que el interior de la casa quedara totalmente arrasado y parte del tejado se desplomara. El inmueble quedó precintado, ya que era inhabitable.
En el momento en el que se declaró el fuego la casa estaba vacía, por lo que no se registraron daños personales.
Una vez concluida la extinción del incendio, la Policía Nacional abrió una investigación para determinar sus causas. Los primeros indicios apuntaban a que se podía haber tratado de un fuego intencionado.
Las sospechas apuntaron a un hombre que había vivido allí hasta hacía poco. Se trataba del novio de la hija del propietario de la casa. El joven se había instalado con la familia de su pareja, pero la convivencia había sido muy problemática. Finalmente había roto con su novia y había tenido que marcharse. El joven acusaba a la familia de la chica de haber influido en la ruptura y había llegado a amenazar de muerte al padre.
Las pesquisas realizadas por los agentes del Grupo de Investigación de la comisaría de Distrito Oeste llevaron finalmente a la detención del joven el pasado miércoles, acusado de un delito de incendio y daños.
Tras el incendio la familia tuvo que dejar la casa, ya que había quedado completamente inhabitable. A día de ayer, casi un mes después del incendio, la casa sigue presentando las señales del grave incendio, con partes del tejado desplomadas.
