Investigación

Aparece muerta en su celda Noemí Martínez, la mujer que mató a su hija Olivia en Gijón

La procesada, que se habría quitado la vida, llevaba varias semanas en la prisión de Asturias, desde que el pasado lunes se formalizase su imputación por asesinato 

Noemí Martínez, a su salida del Hospital de Jove, custodiada por la Policía, después de asesinar a su hija.

Noemí Martínez, a su salida del Hospital de Jove, custodiada por la Policía, después de asesinar a su hija. / M. C.

I. Peláez

Noemí Martínez Largo, la mujer de 48 años encarcelada desde el pasado mes de noviembre como acusada de haber asesinado a su hija Olivia en una vivienda de Gijón, ha sido hallada muerta este domingo en la cárcel de Asturias. Todo indica que se suicidó en su celda utilizando una sábana durante la noche, aunque, según ha podido saber este periódico, la mujer no llegó a colgarse del todo. Justo hace una semana que el juez concretó la imputación de Martínez Largo por un delito de asesinato.

La mujer, nacida en 1975 en El Espinar, Segovia, se había trasladado a Gijón por motivos laborales en compañía de su hija Olivia. Después de un largo litigio judicial con su exmarido, Eugenio García, Martínez Largo acabó perdiendo la custodia que ostentaba, y para ella quedaba establecido un régimen de visitas. Fue a finales de octubre del año pasado cuando esta mujer recogió en Segovia a su hija y la trajo de vuelta a Gijón. Nada más llegar al piso de la avenida de la Constitución, según apuntan los investigadores del caso, le dio una gran dosis de medicamentos diluidos en un Colacao. En concreto, el triple del lorazepam que mataría a un adulto, según confirmó luego la autopsia que se le practicó a la pequeña.

La mujer fue detenida en la vivienda y trasladada al Hospital de Jove para un examen psiquiátrico. Fue entonces cuando pronunció que "mejor conmigo o con nadie", respecto a su hija Olivia. Después, ya no volvió a hablar sobre los hechos acaecidos. Ni delante de la Policía ni de la juez instructora a lo largo de todo el procreso. Se decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Los informes psicológicos llevados a cabo por el equipo psicosocial del juzgado revelaron que la encausada "era consciente de la naturaleza y entidad" de su conducta, "distinguía el bien del mal y tenía capacidad para haber actuado de otro modo" en el momento en el que suministró las pastillas a su hija.

Martínez Largo fue trasladada el pasado mes de marzo desde el Centro Penitenciario de Asturias hasta la cárcel de Ávila. Hace unas semanas regresó al penal asturiano porque tenía una vista en el Palacio de Justicia de Gijón para concretar su imputación por asesinato. Fue el pasado 12 de septiembre. Las fuentes consultadas entonces describieron que la imputada se mostró "impasible" durante la vista y no pronunció palabra.