Agreden y extorsionan a un hombre tras acusarle de un ‘vuelco’ de droga

Agentes de la Policía Nacional detuvieron a dos hombres en Ciutadella por dar una brutal paliza a la víctima

Agentes de la Policía Nacional, junto al coche patrulla.

Agentes de la Policía Nacional, junto al coche patrulla. / POLICÍA NACIONAL

Lorenzo Marina

Lorenzo Marina

Cabezazos en la cara y golpes con un palo. De esta manera dos hombres agredieron con brutalidad a la víctima, a la que culpaban de haber propiciado un ‘vuelco’ de droga en el domicilio de uno de ellos. La Policía Nacional detuvo en Ciutadella a los dos hombres, uno de 25 y otro de 38 años, por los presuntos delitos de extorsión y de lesiones.

Las primeras amenazas se produjeron a finales del pasado mes de julio. Los dos individuos ahora arrestados acusaban a la víctima de haber ofrecido la dirección de la casa de uno de ellos. Esto, a su juicio habría facilitado que se produjera un ‘vuelco’ o robo de droga en el interior.

Así, los dos individuos se presentaron en su domicilio para tratar de amedrentar a la víctima y a su familia mediante amenazas de muerte. De hecho le dijeron que tenían un arma de fuego y que le pegarían dos tiros si no pagaba el importe de la sustancia estupefaciente que habían sustraído a uno de ellos en su vivienda.

Brecha en la cara

En otra segunda ocasión, el comportamiento de estos dos individuos fue mucho más expeditivo al presentarse de nuevo en el domicilio de la víctima. Los dos sujetos le propinaron numerosos golpes en todo el cuerpo con un palo. Uno de ellos le dio un fuerte cabezazo que le causó una brecha en pleno rostro.

En vista de que el hostigamoento que estaba sufriendo no iba a cesar y que cada vez esta iba a mayores, la víctima decidió denunciar lo que le estaba ocurriendo a la Policía Nacional.

A raíz de esta denuncia, los investigadores lograron su plena identificación y pusieron en marcha un discreto dispositivo de seguimiento. Finalmente los policías detuvieron el martes a los dos individuos para impedir que pudieran materializar sus amenazas de muerte a la víctima.