Un joven de 24 años ha sido detenido en la madrugada del sábado en Palma tras agredir a su madre y amenazar con una pistola a los policías que acudieron al domicilio. El sospechoso se mostró muy alterado y agresivo y obligó a los agentes a extremar las precauciones, hasta que consiguieron que soltara al arma, que resultó ser de aire comprimido, y lo redujeron. En el domicilio se encontraban, además de la víctima, la pareja y los dos hijos del sospechoso, de uno y tres años.
Los hechos ocurrieron hacia la medianoche del viernes en la barriada de es Fortí, explicaron fuentes policiales. La Policía Nacional fue alertada de una persona muy violenta en una vivienda. Las patrullas que acudieron al lugar vieron a muchos vecinos asomados a sus ventanas, que les indicaron en qué domicilio estaban ocurriendo los hechos.
Una mujer de unos 55 años abrió la puerta a los agentes y corrió a protegerse tras ellos. Según contó, su hijo la había cogido por el cuello y estaba muy alterado. Los policías entraron en el piso y escucharon los llantos de unos niños. En ese momento apareció en el recibidor el joven, fuera de sí y empuñando un arma.
Los policías extremaron las medidas de seguridad. Desenfundaron sus pistolas y le pidieron reiteradamente que tirase el arma. Finalmente, el sospechoso se metió en una habitación, donde soltó la pistola. Los agentes se abalanzaron entonces sobre él y consiguieron reducirlo y detenerlo. Los policías comprobaron que en el domicilio se encontraban su mujer y sus dos hijos, de uno y tres años. Ninguno de los tres había resultado herido.
El acusado fue arrestado por un delito de malos tratos en el ámbito familiar y trasladado a una comisaría, donde estaba previsto que fuera interrogado antes de ser puesto a disposición judicial.
