El fiscal pide 15 años de prisión para el presunto autor de un incendio en la antigua cárcel de Palma con un grave riesgo para las personas. Como consecuencia del fuego, dos personas resultaron intoxicadas tras inhalar el humo desprendido en la combustión.
Los hechos ocurrieron sobre las cinco y media de la madrugada del pasado 27 de enero en la antigua cárcel de Palma, situada en la carretera de Sóller. La ingente cantidad de enseres acumulados en la vieja penitenciaría provocaron una rápida combustión.
Así, un hombre que pernoctaba en el antiguo penal perdió todos los efectos que se encontraban en su dormitorio. Entre estos se encontraban un chándal, unas zapatillas de deporte. 60 euros en metálico -que guardaba debajo de la almohada-, un teléfono móvil, una cámara de fotos, una cazadora, una tablet y un ordenador portátil . Todos ellos fueron valorados en unos 1.000 euros.
Otras dos personas que se encontraban durmiendo en dicho inmueble y tuvieron que ser desalojadas sufrieron intoxicación por inhalación de humo y por la emanación de gases tóxicos. Así, un hombre que pernoctaba en una dependencia situada en la segunda planta tuvo que estar ingresado en urgencias y precisó de la administración de oxígeno durante dos horas.
Además, otro hombre que se encontraba durmiendo en una dependencia de la primera planta de la antigua prisión de Palma también sufrió una intoxicación por inhalación de humo. Esta víctima tuvo que permanecer seis horas recibiendo oxígeno.
Delincuente habitual
El presunto autor del incendio en la antigua prisión de Palma fue detenido por agentes de la Policía Nacional el pasado 29 de enero. De acuerdo con las investigaciones policiales, el móvil del arrestado para prender fuego al viejo centro penitenciario de Palma fue una suerte de venganza, al no haberle permitido pernoctar allí.
Tras declararse el fuego en el antiguo penal de Palma en la madrugada del pasado 27 de enero, investigadores del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional abrieron una investigación para tratar de esclarecer los hechos. Las sospechas recayeron desde un primer instante en un delincuente habitual, con numerosos antecedentes. Al parecer, este individuo había mantenido un abierto enfrentamiento con las personas que residían allí.
Las pesquisas determinaron que el presunto autor del incendio era este sujeto con 47 detenciones anteriores. El fiscal solicita para el encausado una pena de 15 años de prisión por un supuesto delito de incendio con grave peligro para la vida o la integridad física de las personas.
