La Policía Nacional arrestó el miércoles a un delincuente habitual, con medio centenar de antecedentes, como presunto autor del fuego declarado el pasado lunes en un edificio de la antigua prisión de Palma, tras el que dos indigentes tuvieron que hospitalizados por inhalación de humo. Según los investigadores, el sospechoso habría provocado el incendio en venganza porque los otros okupas no le dejaron pernoctar allí. El hombre fue conducido ayer a disposición judicial e ingresó en prisión acusado de los delitos de tentativa de homicidio e incendio.
El fuego se declaró sobre las seis de la mañana del pasado lunes, en un bloque de pisos donde residían los funcionarios de la antigua prisión de Palma, abandonada desde hace años y okupada ahora por indigentes.
Según informa la Policía, la central del 091 recibió un aviso de testigos que veían salir humo de la antigua cárcel. Los primeros agentes que llegaron al lugar localizaron el fuego en la primera planta del edificio, y se encontraron con varias personas que no podían salir y que tuvieron que ser rescatadas. Enseguida llegaron los bomberos, que sofocaron las llamas. Sin embargo, alertaron de que la gran cantidad de basura acumulada y el mal estado del edificio podría complicar mucho una actuación en caso de incendios de mayor envergadura.
Dos de los indigentes que dormían en el lugar, dos hombres de 43 y 53 años, mostraban síntomas de intoxicación por inhalación de humo. Fueron atendidos por la dotación de una ambulancia y trasladados a un hospital.
La Policía Nacional abrió una investigación para determinar el origen del fuego. De inmediato las sospechas recayeron en un delincuente habitual que había mantenido un enfrentamiento con los okupas porque no le dejaban pernoctar allí. Este hombre llegó a amenazarles con pegar fuego al edificio.
Las gestiones policiales permitieron identificar al sospechoso, que fue detenido por agentes del Grupo de Homicidios el pasado miércoles. El hombre, con 47 arrestos anteriores, fue conducido ayer por la mañana a disposición judicial. Declaró ante el juez durante cerca de media hora y negó tener ninguna relación con el incendio. El juez decretó su ingreso en prisión.
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