Un grupo de cuatro experimentados ciclistas vio cómo una furgoneta se les echaba encima la tarde del sábado y el conductor no frenaba. "La furgoneta arrastró 20 metros a mi amigo encima del capó", puntualizó ayer Javier, uno de los cuatro miembros del grupo y el único que salió completamente ileso del lance. El más grave sufrió fracturas en las dos muñecas y le colocaron una placa en una de ellas.
Los hechos ocurrieron sobre la una y veinte de la tarde del sábado en el Camí dels Reis, nada más pasar la rotonda del Camí de La Vileta. Los ciclistas circulaban en sentido a Son Rapinya. De frente vieron acercarse a una furgoneta.
"Vi que la furgoneta se había dado un golpe en un coche y pretendía darse a la fuga. Pisó el acelerador y se encontró con nosotros", recordó ayer Javier.
Su compañero Jaime se llevó la peor parte. El fuerte impacto de la furgoneta catapultó al ciclista encima del capó. Lejos de aminorar, el conductor siguió pisando a fondo el acelerador para intentar darse a la fuga. "Estuvo dando gas todo el tiempo", subrayó Javier. Sus otros dos amigos sufrieron policontusiones y él salió milagrosamente ileso.
El conductor de la furgoneta prosiguió su camino a toda velocidad con la vana esperanza de que nadie anotara su número de matrícula. "En ese momento había muchísima gente en ese punto que lo vio", recordó el deportista. Jaime, el que recibió el impacto de lleno, fue trasladado a la Policlínica Miramar para ser operado de las muñecas. Tenía fracturas en ambas, pero solo fue intervenido en una, donde le colocaron una placa.
Autoinculpada
Uno de los momentos más surrealistas se vivieron poco después en el juzgado de guardia. Los otros tres deportistas acudieron a poner la denuncia y se toparon con una mujer que se autoinculpaba de un atropello con una furgoneta a unos ciclistas. "Vi perfectamente que era un hombre. Creo que ha metido en un lío a su novia", indicó.
En la tarde de ayer el conductor de la furgoneta se personó en el cuartel de Sant Ferran de la Policía Local para confesar los hechos y prestar declaración. Quedó en libertad con cargos al no tener antecedentes.
Javier hizo especial hincapié en la importancia que tuvo la cámara acoplada a una bicicleta para grabar el atropello. "Será el regalo estrella estas Navidades para los ciclistas", auguró.
