Zonas acústicas

Un limitador de sonido rebajará el ruido de verbenas y terrazas en Valencia

Los locales especializados y las actuaciones musicales en la vía pública están obligados a incorporar un limitador registrador

Una verbena de Fallas.

Una verbena de Fallas.

Saray Fajardo

Los elevados niveles de ruido se han convertido en una de las principales protestas de las diferentes asociaciones de vecinos de la ciudad. Por consiguiente, la concejalía de Calidad Acústica y del Aire de València prevé reforzar la regulación de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), que se encuentran incluidas en la nueva ordenanza de protección contra la contaminación acústica. La nueva normativa, que será aprobada mañana en comisión, modifica 40 artículos, cinco anexos y una disposición transitorio del texto actual.

De esta manera, el consistorio podrá establecer las medidas oportunas para disminuir los niveles sonoro tras estudiar el nivel de gravedad de la situación. En este sentido, se podrá cortar el tráfico durante determinados períodos de tiempo en los que se superen los objetivos de calidad, reducir el horario de las actividades que generen ruido, suspender la concesión o tramitación de títulos habilitantes que puedan agravar la situación, interrumpir las autorizaciones para instalar sillas y mesas en la vía pública, llevar a cabo campañas de concienciación o destinar agentes de la autoridad para realizar tareas de vigilancia. Las Mesas de Seguimiento serán las encargadas de evaluar estas medidas para valorar si han sido eficaces.

Además, la nueva ordenanza, que recoge algunas demandas realizadas por el vecindario y varias entidades sociales y empresariales, también obliga a los locales especializados o a las actuaciones musicales en la vía pública a disponer de un limitador registrador. El dispositivo deberá estar integrado en la cadena de sonido para limitar todos los equipos de reproducción y amplificación sonora o audiovisual. El aparato, que estará restringido a a los técnicos municipales e instaladores, tendrá que recoger los datos de aislamiento real entre la actividad y la vivienda más expuesta.

Los locales sujetos a la normativa de espectáculos públicos, por su parte, deberán estar situados a una distancia mínima de 30 metros para evitar la acumulación de espacios con características similares. Sin embargo, las actividades con ambientación musical deberán tener una distancia mínima de 65 metros, contados desde cualquiera de las puertas de acceso hasta las de cualquier otra actividad con estas particularidades.

Estudio acústico

La concejalía también introduce en la nueva normativa la posibilidad de exigir un estudio acústico previo a la autorización de sillas y mesas en las terrazas. En él, se incluirán algunos aspectos como el horario de funcionamiento o las características del local. El objetivo es garantizar que se cumple la normativa acústica, cuyas condiciones deberán ser aprobadas por el órgano competente de la administración. En caso de que el consistorio no exija esta documentación, el local deberá cumplir con los horarios y los niveles establecidos en la ordenanza.

El concejal responsable del área, Giuseppe Grezzi, ha señalado que la normativa "da respuesta a las necesidades de la ciudadanía en materia de descanso y del tiempo para posibilitar la normal actividad de una ciudad que quiere ser sostenible y agradable". "València tendrá una normativa actualizada, que será el apoyo legal e imprescindible para seguir avanzando", ha concluido.

Limitación en el uso de electrodomésticos

La nueva ordenanza también limita la producción de ruidos y vibraciones que dificulten la convivencia urbana. En este sentido, se considera actividad no tolerable el uso de electrodomésticos o maquinaria susceptible de producir ruidos molestos en horario de 22 h a 8 h. En este sentido, Ciudadanos denuncia que esta medida va a afectar "principalmente a las familias con menos recursos, que son las que podrían tener máquinas más antiguas". Por ello, solicitan una línea de ayudas.

Además, la normativa modifica el toque de campanas y relojes, que se establece en horario de 8 h a 22 h. No obstante, las Campanas del Micalet quedan exentas de la modificación. Además, establece algunas recomendaciones en el toque de oración o en la celebración de fiestas, entre otros.

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