Fútbol. Primera División

La opinión de Gabriel Forteza del RCD Mallorca-Real Madrid: Sevilla espera, otra vez

Tchouaméni celebra su gol en Son Moix

Tchouaméni celebra su gol en Son Moix / AP

Ya está. Ya pasó. El Real Madrid, quiero decir. El partido post-Copa y el partido entre partidos del Real Madrid en la Champions.

Esta vez no hubo 1-0 con gol de Lago Junior o de Nacho en propia puerta. Esta vez el único que acertó fue Tchouameni en un Real Madrid que, con la ley del mínimo esfuerzo, se llevó una victoria mínima, como ya hizo en la primera vuelta en el Bernabéu.

Jugó Muriqi solo en punta de inicio. Y acabó el Mallorca con Muriqi, Larin, Abdón y Radonjic, todos a la carga, pero sin carga alguna pues ya el físico había pasado factura.

Hubo miles de Abdones en la grada. Y hubo reparto de hostilidades: remata Raíllo, y Bellingham al larguero; tira Vinicius y para Rajkovic; chutazo espectacular de Darder y para Larin; y no mucho más, la verdad.

Por cierto, fue salir Vinicius y retirarse Maffeo, ¿casualidad?

Aplausos para Modric. ¿Y ahora?

Ahora volvemos a Sevilla, dos semanas después, al mismo aeropuerto, a las mismas calles, con menos afición, claro, y distinto escenario: el Ramón Sánchez Pizjuán y tres puntos en juego vitales en la lucha por la permanencia, tres puntos que también serían un buen título… en Sevilla.

Por delante una semana para trabajar con tranquilidad, pero con la personalidad necesaria ante el calendario que viene. 

Suscríbete para seguir leyendo