Robert Sarver fue uno más de tantos espectadores que estuvieron presentes ayer en el Visit Mallorca Estadi. El dueño del Mallorca, que se sentó al margen de los directivos en el palco, siguió con atención el encuentro de los suyos. No guardará muy buen recuerdo del equipo el mandatario norteamericano, ya que tras ver perder a los de Luis García ayer frente a Osasuna, también hizo lo mismo en la derrota sufrida en el Santiago Bernabéu el pasado miércoles.
Ayer, antes de comenzar el partido, bajó a la bocana del túnel de vestuarios para saludar a los jugadores, mostrándose especialmente cariñoso con algunos de los más veteranos, como Reina.
Las visitas de Sarver a la isla son muy contadas y suele aprovechar sus periodos de vacaciones para visitar el club del cual es el propietario. El presidente Andy Kohlberg cuenta con su total confianza y apenas interfiere en sus decisiones.
