La Torre Picada de Sóller ya es propiedad del Consell de Mallorca

La presidenta Cladera formaliza la adquisición de la finca con la firma de la compraventa

La presidenta del Consell, Catalina Cladera, junto con el conseller insular de Hacienda y Función Pública, Josep Lluís Colom, firman con la propiedad de la finca el contrato de compraventa

La presidenta del Consell, Catalina Cladera, junto con el conseller insular de Hacienda y Función Pública, Josep Lluís Colom, firman con la propiedad de la finca el contrato de compraventa / CONSELL DE MALLORCA

EP

La Torre Picada de Sóller ya es propiedad del Consell de Mallorca, después de que la presidenta Catalina Cladera haya formalizado la adquisición de la finca con la firma de la compraventa.

Según ha informado el Consell este sábado en nota de prensa, esta institución insular ha formalizado la compra de la finca de Sóller donde se encuentra ubicada la Torre Picada, elemento patrimonial declarado Bien de Interés Cultural que desde ahora ya es de propiedad pública.

La presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, junto con el conseller insular de Hacienda y Función Pública, Josep Lluís Colom, han firmado con la propiedad de la finca el contrato de compraventa, haciendo que la Torre Picada de Sóller sea de todos los mallorquines. Cladera ha agradecido a la familia Castañer Puig que haya optado por hacer posible que la finca pase a ser patrimonio público en vez de vender a compradores privados.

El pasado mes de noviembre, el pleno habilitó una partida de crédito por valor de 1.360.000 euros para hacer frente al proceso de compra.

Se trata de una finca de una cuarterada, en una zona muy frecuentada al lado de la espadada en la zona norte del municipio de Sóller y de su puerto. Contiene una edificación de cerca de 150 metros cuadrados, de sección circular y 12 metros de altura, conocida por su Torre Picada, la torre de defensa más grande de la isla y una de las mejor conservadas, de la que hay registros históricos de principios del siglo XVII.

El servicio de Patrimonio del Consell ha destacado los valores patrimoniales de la construcción, como muestra de arquitectura defensiva que fue el común denominador en todas las zonas de litoral de la isla. Dentro de este conjunto de tipologías arquitectónicos, las torres de defensa serían las expresiones más sencillas, pero con un valor simbólico y patrimonial muy elevado. Y con este motivo ha justificado que se inicie el trámite para convertir la torre y el terreno que la bordea en patrimonio público.

La Torre Picada ha formado parte de diferentes rutas senderistas señalizadas en el municipio de Sóller, y su entorno ha permanecido accesible, hecho que ha convertido este punto en un lugar popular que también ha quedado incluido dentro de los itinerarios familiares del Consell y parte del proyecto europeo Cherish Interreg Europe, proyecto interregional para mejorar las políticas de patrimonio natural y cultural. El Ayuntamiento de Sóller había expresado la voluntad de que el Consell pudiera iniciar el procedimiento de compra de la Torre Picada, por la indiscutible importancia histórica y cultural del monumento.

La finca de la Torre Picada se incluirá dentro de la red de fincas públicas de la institución, para garantizar el mantenimiento del patrimonio natural y arquitectónico que la ha caracterizado durante los últimos cuatro siglos.

La compra de la Torre picada completa la estrategia del Consell para convertir en patrimonio público espacios emblemáticos de la isla, como la antigua central de Alcanada, la Tanca de Can Domènech o el Castell de Alaró.