La unificación y ampliación de la reserva marina de las islas de El Toro y Las Malgrats, en Calvià, supone la creación de un gran espacio protegido de unas 3.000 hectáreas, lo que multiplica por 13 la zona preservada anteriormente, lo que, además del evidente beneficio medioambiental, supondrá un gran beneficio para la industria pesquera al contribuir al enriquecimiento del ecosistema marino, al tiempo que ayudará a impulsar subsectores como el buceo recreativo.

En ese mensaje incidió este miércoles la comitiva institucional encabezada por la presidenta del Govern, Francina Armengol, que visitó en barco la reserva marina, junto a la consellera de Agicultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha, el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miguel Mir y el alcalde de Calvià, Alfonso Rodríguez Badal, quien celebró la medida conservacionista.

Rodríguez Badal recordó que ya en 2020 el pleno municipal aprobó un acuerdo para pedir la unificación y ampliación de esas reservas marinas. Armengol destacó que Balears es líder en superficie marina protegida, con 66.436 hectáreas, y subrayó que la Comunidad «va por el buen camino» a la hora de conservar la biodiversidad marina.

Igualmente, apuntó los beneficios que tendrá para la pesca profesional y recreativa de toda la zona suroeste de la isla, de la misma manera, dijo, que impulsará el buceo recreativo, en línea con la «economía azul». Balears, según destacó el Ejecutivo autonómico, es un referente del buceo turístico «con más de 60.000 inmersiones anuales».

Reserva marina de la isla de El Toro y las Malgrats Ayto de Calvià

De la Concha, mientras, destacó que «este paso importante» de la ampliación de la reserva ha sido posible, porque tanto las administraciones como los pescadores han «remado en la misma dirección». De la Concha, recordó que estas reservas son de «interés pesquero» y su potenciación ayuda a que haya «pescado fresco local» y a que las especies sean «cada vez más abundantes y grandes». El Ejecutivo autonómico destacó que, gracias a su protección, la biomasa que hay en la isla del Toro es la mayor que se ha registrado en ningún otro punto del litoral balear. 

A la visita asistieron representantes de organizaciones ecologistas y de cofradías de pescadores. En un comunicado, la entidad conservacionista Marilles destacó que es «un paso en la buena dirección», pero objetó que la nueva reserva «nace coja, porque no llega hasta la Illa del Sec y sólo incluye un 7,5% de zona altamente protegida». Recordó también que Balears únicamente tiene «un 0,2% de su mar declarado como reserva integral», un dato, remarcó, a mejorar de acuerdo a los compromisos para 2030.