La junta local de seguridad celebrada ayer en Calvià decidió potenciar la coordinación entre la Policía Local y la Guardia Civil para atender a la población flotante durante la próxima temporada turística, que todavía estará marcada por la pandemia.

En este sentido, desde Delegación del Gobierno «ya se han solicitado refuerzos para la Operación Verano», según informó ayer el Ayuntamiento, por lo que «se incrementarán más o menos» los efectivos de la Guardia Civil «en función de la evolución de la temporada turística».

Además, está previsto reabrir la oficina del Servicio de Atención al Turista Extranjero en Punta Ballena (Magaluf), un local cedido a la Guardia Civil, y se renovará el acuerdo para contar con un servicio de traducción en alemán e inglés.