Una nueva consecuencia de la falta de efectivos policiales: Alaró se ha visto obligado a cerrar el camí del Castell debido a la gran acumulación de vehículos y del embotellamiento que provoca la avalancha de visitantes a los espacios naturales del municipio, una multitud de visitantes difícil de controlar con un solo policía de guardia. Así lo ha trasladado el alcalde Llorenç Perelló a través de una carta dirigida a la presidenta del Govern, Francina Armengol, a quien reclama que «articule los mecanismos de colaboración» entre el municipio y su Ejecutivo para «mejorar la seguridad» de los ciudadanos.

En su misiva, el alcalde expone que Alaró cuenta con un gran número de caminos y espacios naturales que «la gente aprovecha para visitar, sobre todo, los fines de semana y los días festivos». Muchos, prosigue Perelló en su carta, llegan de otras localidades provocando «problemas de embotellamiento de vehículos o coches mal estacionados». Se trata, razona, de un problema que ha ido en aumento de forma exponencial durante este mes, un hecho derivado de «la reducción de la oferta de ocio y actividades sociales» debido a la pandemia de la covid-19. De hecho, explica, se ha tenido que cerrar en dos ocasiones el camí del Castell que da acceso al Puig d’Alaró, una medida que se tomó este lunes festivo y también el primer domingo de octubre debido «a la gran acumulación de vehículos» y al «embotellamiento» ocasionado.

Se trata de un problema que tanto el alcalde como los agentes de la Policía Local ya intuían que ocurriría y así lo transmitió en la reunión de alcaldes con la presidenta a finales de agosto, una inquietud que el propio Perelló también trasladó a la consellera de Salud, Patricia Gómez.

«La plantilla actual de la Policía Local solo garantiza que haya un agente de guardia los fines de semana. Situaciones de aglomeraciones o de emergencias, sumadas al día a día de la Policía Local, hacen imposible que se pueda prestar un servicio de calidad», argumenta Llorenç Perelló en su carta dirigida a Armengol para reclamar más efectivos y ayuda para controlar la saturación de vehículos en los espacios naturales alaroners. «Nos encontramos ante una falta de efectivos policiales muy grande. Si esto ocurre un día que deba subir un vehículo de emergencia, como ocurrió hace unas semanas, no podrá subir», deja claro Perelló, que reclama «la colaboración a Emergencias porque los efectivos que tenemos no son suficientes para cubrir los problemas que tiene Alaró actualmente».