El PP balear defendió ayer la actuación de sus regidores de Campanet y Búger, que con sus votos facilitaron el pasado sábado la elección de alcaldes pertenecientes a formaciones antagónicas desde el punto de vista ideológico. En Campanet, el voto del edil popular permitió la elección de una alcaldesa del PSOE, mientras que en Búger el PP facilitó la investidura del alcalde de Més en detrimento del candidato socialista.
En este sentido, el secretario general del PP balear, Toni Fuster, señaló ayer que "las juntas locales del PP tienen potestad para decidir cual es el apoyo o voto que quieren dar a los otros partidos para el beneficio de su pueblo", en referencia a lo acontecido en los plenos de Campanet y Búger.
Fuster no desaprovechó la ocasión para atacar a ecosoberanistas y socialistas afirmando que "al contrario de Més y PSOE, posicionados siempre en contra de nosotros, velamos siempre por el interés general, no el partidista".
Por último, el secretario general del PP regional aseguró que "la directiva del PP de Balears no ha dado instrucciones a las juntas locales para ningún tipo de pacto o negociación en sus respectivos municipios", por lo que atribuye exclusivamente a las agrupaciones locales la decisión de apoyar a candidatos de otros partidos antagónicos con el fin de impedir la elección de los representantes de los partidos más votados en los dos citados municipios. En los dos casos, el voto del PP ha sido definitivo para la investidura de sus respectivos alcaldes.
