"En los momentos de abatimiento que tocan en la vida de nuestra gente, solo el misterio de la entrega amorosa y sin reservas a Jesucristo en la cruz puede ayudar a no caer en el desánimo y a avanzar por los caminos de la esperanza". Con estas sentidas palabras el Papa Francisco quiso expresar ayer su proximidad a las víctimas y afectados de las inundaciones que asolaron parte del Llevant hace ahora un mes.

El pontífice ha remitido una carta al obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, donde muestra su proximidad y plegaria con los damnificados. Según informa el Bisbat, el Papa da respuesta así a la misiva enviada por Taltavull los días después de las inundaciones, donde le pedía que tuviese presentes en su plegaria a quienes habían perdido a familiares en la catástrofe y a los afectados en general. Asimismo, ha invitado al obispo a ser "signo e instrumento de la misericordia del Buen Pastor" y a "consolar a los afectados", haciéndoles llegar su "afectuosa proximidad y bendición, su plegaria por sus necesidades y sus sufragios por quienes han perdido la vida".

Colecta extraordinaria

La Diócesis de Mallorca ha recaudado 150.179,49 euros a través de la colecta extraordinaria del fin de semana del 13 y 14 de octubre en parroquias y lugares de culto para paliar las necesidades de los afectados. Se gestionan a través de los rectores de Sant Llorenç, s'Illot, Artà y Càritas Manacor, con la coordinación de los Servicios Sociales de Sant Llorenç.