Tras más de un año de obras para la electrificación de la línea que va desde la estación de enlace, cerca de Inca, hasta la de Manacor, el Govern prevé que los trabajos puedan concluir durante el mes de octubre, pese a que debían estar listas este pasado junio.

Un retraso debido a distintas conjeturas y problemas técnicos que han llevado a que el proyecto haya acumulado hasta dos meses de demora. La mayor parte de la catenaria ya está situada en su lugar, así como se están acabando las obras de las nuevas subestaciones que deben dar el flujo eléctrico adecuado a la línea.

Así las cosas ahora la principal tarea pendiente se centra en ir colocando todo el cableado necesario que lleve la corriente a todo el sistema. Posteriormente se pasará a la fase de pruebas con las nuevas máquinas.

Con la electrificación está previsto que el trayecto entre Palma se reduzca en entre cinco y diez minutos (para que pase a ser por primera vez de menos de una hora), debido a que ya no hará falta realizar un trasbordo de tren en el enlace como hasta el momento. El otro motivo está en la modernización de los convoyes, que precisamente al ser eléctricos podrán acelerar y frenar de una forma mucho más rápida.

Protestas por la obra

Desde que las obras llegaron a las cercanías de la estación de Manacor, situada muy cerca de la avenida des Tren y por tanto de viviendas, han sido numerosos los vecinos que han protestado por los ruidos y las molestias que causan los trabajos, que comienzan de noche una vez terminan las frecuencias.