La Guardia Civil ha abierto una investigación para aclarar los hechos que rodearon un incidente durante el último Firó de Sóller que le provocó quemaduras en la cara. La víctima tuvo que ser hospitalizada. Los hechos que investiga Intervención de Armas del Instituto Armado se produjeron durante el simulacro de batalla entre moros y cristianos que se celebró en la plaza de la Constitución.

El incidente se desencadenó cuando un participante del colectivo de moros prendió la mecha de un cañón cargado con pirotecnia pero no explotó según se tenía previsto. Fue entonces cuando este participante se puso frente al cañón y la carga explosiva deflagró.

Como consecuencia del fogonazo, la víctima, que era el encargado de hacer los disparos con la pieza de artillería simulada, se vio envuelto en una bola de fuego que le provocó serias heridas por diferentes partes del cuerpo. Especialmente en la cara, por lo que tuvo que ser ingresado en un hospital para recibir asistencia sanitaria.

La secuencia de los hechos quedó recogida en un vídeo que un espectador realizó desde un balcón de la plaza, lo que en pocas horas se hizo viral a través de las redes sociales.

Miembros de la unidad de Intervención de Armas se desplazaron ayer en Sóller para recabar información de los hechos, en tanto que este organismo ha abierto una investigación para averiguar las causas por las que el cañón no detonó su carga de pólvora en los parámetros previstos causando un herido. La Policía Local de Sóller remitió sus informes a la Guardia Civil.

Precisamente, en la última edición de que los 50 kilos de pólvora previstos se quedaron finalmente en 10 por la intervención de la Guardia Civil, que inmovilizó parte del material explosivo. Delegación de Gobierno atribuyó la falta de pólvora a un problema de planificación de la empresa suministradora, al tiempo que recordó que, "hasta el último momento", mantuvo contactos con el Ayuntamiento para subsanar "una serie de deficiencias administrativas".

En cualquier caso, la emotividad de la fiesta no se vio afectada. Miles de personas tomaron parte en las batallas entre moros y cristianos que rememoran la incursión sarracena que se produjo el 11 de mayo de 1561 en la que las