La histórica Torre del Palau, único resto conservado del palacio real construido en tiempos de Jaume II en Manacor, se adaptará a las nuevas tecnologías con la adaptación de la información histórica del edificio a códigos QR, que podrán ser leídos desde un simple teléfono móvil y que aportarán datos complementarios y explicaciones grabadas de su origen y evolución.

La Torre vuelve a abrir al público tras décadas de cierre y una última reforma concluida en 2014. Lo hace cada lunes y sábado desde las 9 hasta las 14 horas con una persona a su cargo que, al mismo tiempo, ofrece la posibilidad de explicar la construcción y la evolución del Bien Patrimonial del siglo XIII.

Ayer la alcaldesa de Manacor, Catalina Riera (El Pi), junto a la directora del Museu d'Història, Magdalena Salas y la historiadora Maria Antònia Cladera, explicaban la satisfacción de haber reabierto uno de los elementos que marcan la historia manacorina a partir de la conquista catalana. "Si hasta ahora no había sido posible no era por una cuestión económica, sino por una falta de recursos humanos, ya que desde Madrid no se nos permite a los ayuntamientos ampliar plantilla", destacaba Riera.

Actualmente la Torre del Palau cuenta ya con numerosos paneles informativos sobre la evolución arquitectónica e histórica del BIC (Bien de Interés Cultural), aunque éstos solo servían hasta el momento para las contadas visitas guiadas, particulares y escolares, que se iban realizando bajo demanda. Ahora la intención municipal es que éstos sean traducidos en cuatro idiomas y cuenten además con un código QR que permita, mediante una simple aplicación móvil, poder adaptar la explicación a personas invidentes mediante audio.

Desestacionalización

Del mismo modo esta semana se acabarán de distribuir los folletos informativos en las oficinas de Turismo y en el museo local, así como se instalarán las señales en cada una de las dos entradas a la Torre. "Se han elegido precisamente estos dos días porque uno, el lunes, es día de mercado, y el sábado para intentar llegar a un mayor número de personas posible, también con una percepción de desestacionalización turística".

Se sabe que la Torre del Palau constaba originariamente de planta baja y dos pisos y estaba coronada por merletes. Que era una pequeña parte del palacio de caza real, que por una parte sería una entrada hacia el claustro interior, y por otra sería el Portal Forà de salida en dirección a lo que ahora es la parroquia de Nostra Senyora dels Dolors.

Modificaciones

Muy modificada con el paso de los años debido al cambio de propietarios (desde la realeza a la familia Orlandis o las Perlas Majorica) hasta ser un edificio público, la última reforma le dio otra vez un carácter lo más cercano al primigenio, con una escalera exterior y cubierta plana.