La depuradora de sa Pobla tiene problemas de obturación de filtros y sistemas debido a los residuos sólidos no degradables que se arrojan al alcantarillado. El más grave es la acumulación de toallitas de papel y otros residuos sólidos.

Desde el Ayuntamiento se ha iniciado una campaña informativa en la que se incide en varios puntos a tener en cuenta por los usuarios. El alcalde, Biel Ferragut explica que "se intenta concienciar a los vecinos para que no viertan residuos sólidos a través de las conexiones de sus residencias".

Entre las recomendaciones se pide que no se echen restos de comida antes de fregar los platos o los enseres de cocina, sobre todo de grasa. También se insiste en no arrojar al retrete papel no higiénico, toallitas, preservativos o bolsas de plástico.

Se insiste en que nunca se debe verter aceite en la pila de fregar. El aceite se debe depositar en una botella y cuando esté llena llevarla al punto verde.

Otro de los vertidos que nunca debe llevarse a cabo es el de sustancias químicas como restos de medicamentos, venenos, insecticidas o disolventes, porque finalmente contaminan el agua.

Biel Ferragut visitó esta semana la depuradora y comprobó los efectos de la mano de Jesús Albela, jefe de servicio de Socamex, la empresa que la gestiona.